Chico Solitario

Parte 4

Onodera

No se por que pero no pude dejar de mirar sus ojos...

Ya, reacciona, sacudí mi cabeza para sacar esos pensamientos y seguí mi camino.
-Ricchan ¿Por qué la demora?- Vi como el pelinegro se acercaba a mi con una gran sonrisa en su rostro.

-Lo lamento, solo tuve un percance- Dije tratando de olvidar lo ocurrido.

-Ten- Puso unas galletas en mi mano.

-Pero, Kisa-san no es necesario yo tengo mi almuerzo- Dije un poco avergonzado.

-Que te las comas- Hizo una cara sería combinada con un puchero.

-Esta bien- Me rendí y abrí el paquete.-Gracias- Hice caso al chico y empecé a comerme las galletas, vi como sonrió satisfecho.

- ¿Que vamos a hacer?- pregunté y mordí una galleta antes de chocar.-Lo siento- Me siento un poco idiota por no mirar hacia donde voy.

-Descuida, yo tampoco me fije por donde estaba caminado-. Me sonrió amablemente un chico pelirrojo.

-No, fue mi culpa- me incliné disculpándome.

-Esta bien, pero a cambio de una disculpa, dime tu nombre- Sonrió.

-Onodera Ritsu- Vi como su sonrisa se agrandaba.

-Haitani Shin- Tomó mi mano.-Es un placer-.Dijo besándola, espera ¿Ehh, que acaba de hacer?.

Me quede mirándolo un poco confundido por su acción.

--Haitani vamos--. Lo llamó uno de sus amigos a lo lejos.

-Esta bien, ya voy- Se acercó lentamente a mi oído.-Nos vemos luego-. Susurró haciendo que me sobresaltara un poco y sentí como olfateó ligeramente mi cuello antes de irse, ok lo admito este tipo de situaciones el día de hoy están absurdamente raras y ¿Por que me están olfateando, estoy desprendiendo un olor raro? Olfatee mi camisa y me encogí de hombros.

-Ok Ricchan, ¿Que acaba de pasar?- dijo Kisa-san un poco confundido.

-Ni yo se, ¿Vamos?- Le resté importancia y seguí caminado seguido por el pelinegro.

Takano

Chasqueé mi lengua y lueo pateé el asiento haciendo que una chica que acabada de entrar al salón se asustara, me recosté en el pupitre mirando a la entrada, un rato después vi como Onodera entraba acompañado por la pequeña molestia llamada "Kisa".

Mientras se acercaban a sus puestos me di cuenta de la cálida sonrisa que el castaño le mostraba al enano, me siento un poco inquieto es como si quisiera que me sonriera de esa manera sólo a mi, no, sólo son tonterías ¿Como voy a estar sintiendo esto por alguien como el, que sólo conozco hace un par de horas?, Es ilógico.

Antes de que el se sentara, de nuevo nuestras miradas se cruzaron haciendo que el se sonrojara un poco, siento la necesidad de protegerlo y que este siempre conmigo, jej, tal vez la falta de sangre en mi sistema me esta afectando enserio.