Onodera
-Onodera- Vi como se iba acercando poco a poco a mis labios.
-No, espera-. Lo último que recuerdo fueron sus labios contra los míos.
Cuando reaccioné me encontraba en una habitación desconocida, me levanté con dificultad del sofá e inmediatamente sentí un ligero dolor en mi cuello, pasé mi mano por la parte adolorida y al mirarla noté un poco de sangre.
Rápidamente empecé a buscar un espejo por todos lados pero no encontré ni uno sólo.
- ¿Que haces?-
-Waaa- Me sobresalté al escuchar la voz de Takano tras de mi.
-¡¿No le han dicho que es malo asustar a las personas?!- Dije un poco molesto.
-¿Y a ti que es de mala educación fisgonear en casa ajena?- Su tono sarcástico me hizo enojar aún más.
-¿Por que estoy aquí?-
- ¿Hubiera sido mejor que te dejara tirado en ese callejón?-
-¿Eh, que esta diciendo, en que momento yo...?-
-Onodera, ¿Te sientes bien?-
-¿Eh ?, si... ¿Que pasó exactamente, podría decírmelo por favor?- Noté como suspiró un poco intranquilo.
Takano
Durante toda la semana no pude dejar de pensar en lo que iba a pasar el sábado, Onodera podría ser atacado por el estúpido de Haitani, sea como sea no puedo permitir que eso pase tengo que protegerlo, no me importa si se enoja conmigo lo quiero a salvo.
.
.
.*Sábado*
Y al final terminé escondido espiando la casa de Onodera, no demoró en llegar Haitani, tenía una perversa sonrisa en su rostro la cual se hacia más grande a medida que se acercaba a su destino, tocó la puerta y unos minutos después salió Onodera, me les acerqué un poco más para poder escuchar lo que decían, y para mi suerte me hice en el lugar adecuado.
-Hola Onodera un gusto volverte a ver- Este tipo me irrita, ¿Cuándo dejará de hacerle eso?.
-Hola- Noté que lentamente apartó su mano de la de Haitani, no pude evitar sentirme aliviado.
-¿A donde quieres ir?-
-Cualquier lugar estaría bien- Le sonrió inocentemente.
-¿Seguro?- Esa sonrisa... No, esto me da mala espina.
-¿Si?- Onodera acaba de hacer una cara de preocupación.
-Ven un momento- Haitani lo llevó hasta un callejón, tengo que apresurarme y seguirlos asegurándome de que no lo...
-Onodera- ¿Que?
-No espera-. ¿Lo besó?!... No planea morderlo ¿O si?!. Vi como Tomó su cuello y lo empezó a asfixiar.
-Sueltalo ahora mismo- No aguanté más y me les acerqué.
-¿O que?- Mostró su mirada retadora mientras empezaba a hacer más presión el el cuello de Onodera, después de un rato cayó inconsciente.
-Vaya eso fue rápido, oye, ¿No crees que es mejor morderlo así? De esta manera no sufrirá tanto- Dijo mientras se acercaba más a Onodera y lamia su cuello. -Oye nunca te habías puesto así por alguien, ¿Te interesa este chico?- Su mirada sarcástica me esta sacando de quicio.
-¿Que te hace creer eso?-
-A, ¿Entonces no te importaría que...?-
Clavó sus colmillos en el cuello de Onodera, y empezó a succionar.
-¡Sueltalo!- Volví a abalanzarme sobre el y comencé a golpearlo con todas mis fuerzas, pero ésta vez si respondió a mis golpes.
-¿Por que? Onodera no te pertenece- Me empujó y empezó a alejarse del lugar. -Oye sólo te diré que no me rendiré con ese chico, si tu lo quieres, te lo arrebataré con mucho gusto- Dijo para finalmente irse.
-Maldito idiota-
.
.
.Suspiré aliviado al acostar al castaño en el sofá de mi habitación, no creo que sea conveniente llevarlo así a su casa, menos mal que no hay nadie.
Iré a comprar unas vendas para curar su herida, aunque... No se si podré hacerlo, su esencia me esta embriagando nuevamente.
-¡Controlate!- Lancé un golpe a la pared y salí a comprar lo necesario.
.
.
.¿Que rayos hace?.
-¿Que haces?-
-Waaa! ¿No len han dicho que es malo asustar a las personas?- dijo con un tono de enfado, y algo agitado.
- ¿Y a ti que es de mala educación fisgonear en casa ajena?Su expresión de enojo se hizo mas notable.
-¿Por que estoy aquí?-
-¿Hubiera sido mejor que te dejara tirado en ese callejón?- Su expresión cambió a una de confusión, de un momento para otro se tambaleó, no debí haber permitido que Haitani lo mordiera.
-Onodera, ¿Te sientes bien?-
-¿Eh?, Si... ¿Que pasó exactamente, podría decírmelo por favor?- Dijo sentándose en el sofá.
Solté un largo suspiro.- ¿De verdad quieres saber?-
-Si-
-De acuerdo-
...
- ¿Ehhh, Haitani me mordió?!, por que hizo algo así?!-.
-Tal vez porque tenía hambre-
-¿Hambre, a caso me ve como un aperitivo?- Creo que acaba de dar justo en el blanco. - ¿Y... Usted está bien?- Dijo mirándome fijamente a los ojos. *Latido*
-¿De qué hablas?- Traté de desviar la mirada.
-¿Que le paso en la cara?-
Sentí su cálida mano rozar la herida que tenía en el rostro. *Latido* ¿Eh, por que está latiendo de esta manera mi corazón?
-¿Takano?- Rayos me estoy poniendo nervioso.
-O.Onodera tu herida e.esta sangrando-
-¿Eh , otra vez?- Tocó la herida, después miró su mano.
-¿Tiene algo con lo que pueda limpiarme?-...Puedo percibir el aroma de su sangre perfectamente, no lo soporto más.
En estos momento lo estoy besando.
-Mmh Takano¿Que hace? suelteme- No quiero separarme de sus... Tomé la cabeza de Onodera para que el no la alejara y posé mi mano en su cadera para acortar la poca distancia que quedaba entre los dos.
-Quiero más- Como ya no esta poniendo tanta resistencia aproveché y metí mi lengua en su boca.
Con agilidad lo llevé lentamente contra la pared sin separarme de sus labios, metí mi pierna entre las suyas y...
-Hmm- Separó nuestros labios y bajó su mirada, me acerqué a su cuello y lamí el poco de sangre que tenía en su herida.
Mierda ¿Desde cuando la sangre sabe tan bien?, No pude evitarlo más y lo mordí.
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Chico Solitario
FanfictionTakanoxOnodera Fanfic chicoxchico No apto para homófobos El resto disfruten (Amo esta pareja)