Saving /Teen Wolf |running#2|

VII

—¿Dónde dicen que está el que vive aquí? –preguntó Danny mientras con Ethan miraba por el ventanal del loft de Derek.

—No lo sé ni me importa –dijo Hannah, los chicos voltearon a verla, habiéndose olvidado por unos segundos de su presencia.

—Gracias por prestármelo, Hannah.

—Fue Ethan y Aiden quienes me lo rogaron, Danny. Yo te lo hubiera prestado a ti sin dudarlo, pero aun así el esfuerzo es conmovedor –Danny rió mientras Ethan fulminaba a Hannah con la mirada.

—¿No tienes que ir con tu novio, Hannah? –dijo Ethan a entre dientes. Hannah alzó los brazos en señal de rendición.

—Vale, ya lo entendí. Me voy. Iré a casa de Lydia a alistarme, nos vemos en un rato, chicos.

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—¿Estás segura? –la voz de Hannah era temblorosa e insegura. No estaba acostumbrada a usar cosas tan... cortas.

—Claro que si –dijo Lydia, rodando los ojos.

—¿No es muy corto?

—Sí, súper corto. Pero sexy, muy sexy. Y totalmente es tu estilo.

—¿Crees que a Stiles le guste?

—Chica, yo que estoy totalmente atraída por el sexo masculino te lo haría en el piso en este instante si no fuera porque no queremos que el vestido se ensucie. Si Stiles no te lo arranca en el momento en que te vea, algo está mal en ese chico.

—Gracias, Lydia. Siempre sabes que decir –dijo Hannah en un tono falsamente dulce. Lydia rodó los ojos, aparentando estar molesta pero no pudo evitar sonreír a las palabras de la chica.

—Ahora trae tu trasero aquí para que pueda maquillarte como la muñeca que eres –Hannah se acercó lentamente hacia Lydia y se sentó en una silla que habían colocado estratégicamente frente al tocador -¿Qué estilo quieres?

—Quiero... algo diferente.

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Sonará cliché, pero en el momento en que Stiles entró a la fiesta, lo primero que vio fue a Hannah, de lejos. Y una vez que lo hizo, no pudo quitar sus ojos de ella. Hannah traía puesto un crop top blanco tipo halter y una falda blanca pequeña, muy pequeña. Unos tacones negros altos con púas en los costados, muy a lo ella, complementaban su atuendo. Su cabello rubio caía sobre sus hombros en pequeñas ondas, sus labios estaban pintados de un color borgoña y parecía un ángel en medio de los humanos comunes.

Hannah se empezó a acercar a él, suavemente esquivando a todos, casi como si flotara. Tenía una pequeña sonrisa de lado en sus labios y sus ojos brillaban como si supiera algo que no conocías. Stiles olvidó completamente lo que estaba diciéndole a Scott, con los ojos aún puestos en Hannah, cuando la chica literalmente saltó a sus brazos. Stiles la atrapó justo a tiempo, la chica rodeando la cintura de Stiles con sus piernas sin importarle si detrás de ella daba una bonita vista a su ropa interior.

Hannah lo besó como si no hubiera mañana y Stiles trató de mantenerle el ritmo, lo cual fue fácil. Había tanta pasión en Hannah, una mezcla de furia y algo más que dejaba en cada beso. Aun así, cada beso con Hannah era diferente.