"Hay algo mal con él."

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Por primera vez desde que llegó, siento que podríamos llevarnos mejor de lo que parecía.

- Chocolatada, medialunas, tostadas y cupcakes de chocolate. - dijo poniendo la bandeja frente a mi. - De nada, de nada. - sonrió y se sentó.

- Gracias por ir a comprar. - sonreí.

- Perdón por ser tan insoportable a veces. - dijo mirando su taza. No sabía que decirle, es decir, no lo soportaba, pero pensé que era así naturalmente. - Me cuesta acostumbrarme a una ciudad tan grande. Además, vos sos insoportable también, y es difícil convivir con un Justin dos. -

- Primero, si, sos insoportable. Seguro, no soy un "Justin dos". - hice comillas con mis dedos. - Eso jamas. -

- Podes negarlo, pero somos iguales. - intentando evitar la conversación, ya que seguro provocaría una pelea, decidí levantarme y prender el equipo para que sonara algo de música. Así no lo mataba.

Saca lo peor de mi este pibe.

"Amo lo que amas, yo te amo..." Sonaba en la radio.

- Ese tema es tan deprimente. - dijo tomando algo de su chocolatada.

- Si, ¿No? Empalaga tanto amor. - Hablando un poco sobre eso. Nunca había sentido ese amor que causa que te acuestes y te levantes pensando en esa persona, ese amor que te hace sentir única, especial, importante. Un amor con el que sentis que si no está, no podrías vivir. No sabía que era eso. La mayoría de las chicas que conocía ya habían tenido varios novios, o al menos uno, pero, ¿Se amaban realmente?, el amor perdió tanto su valor, que las personas eran capaces de decirse "te amo" con solo días de conocerse, y pienso que para amar, hay que conocer. Cada detalle enamora, uno no ama con solo ver, no ama lo que imagina. Creen que es amor, pero en mi opinión, es una falsa ilusión. Quizás pienso eso sólo porque no me ha pasado, pero estoy segura de que es así.
Sólo una vez me gustó un chico, pero no lo amaba, claro. Estaba en segundo año de secundaria y él en tercero. Era el típico chico que le vuela la cabeza y el short a todas las chicas, pero yo creía que en el fondo era mucho más que un estúpido superficial, así que intente acercarme. Una noche, hubo una reunión en la casa de Jenna, una compañera de química. Jugamos algunos juegos mientras tomábamos alcohol, en un momento, este chico que les digo, Kevin, y yo, quedamos solos. Me besó, y me sentí especial como ninguna.
Al otro día, besó a otra chica en mi cara.

Adivinen quien le pegó el pantalón con un súper pegamento a la silla.

Te amo, venganza.

- Jane, yo me tengo que ir. ¿Estás bien? - Ya estaba oscureciendo, así que mi opción era ir a dormir, después de todo estaba sola. Viernes a la noche, durmiendo.

- Si, estoy bien. Ya me siento mejor, voy a leer algo y después a dormir. - expliqué.

- Está bien. Scott no va a volver, seguramente está teniendo sexo por ahí. Y yo... - se frenó.

- Ya entendí. - sonreí. - Divertite. -

(...)

Después de que Justin se fue, ocupé la soledad y tranquilidad de mi departamento para ordenar. Apenas llevaban una semana viendo acá, y ya habían logrado que todo sea un asco. Ropa tirada, zapatillas por todos lados, gorras, gorros, medias, cartas...

This isn't right. «Justin Bieber - Español»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora