La desterrada › Old Magcon

47. Secuestrada.

Me desperté gracias que el timbre de mi casa no paraba de sonar. Me levante soñolienta pensando en lo que pasó ayer en la noche.

— ¿Yo te gusto? — le dije a Nash.

— ¿Por qué me preguntas eso? — se rió algo incómodo.

—Por que eras el que más me odiaba antes de mi accidente, el primero que vi al despertar, hace unas horas intentaste besarme y tus miraditas mientras bailaba con Matt no eran muy amigables ¿Y qué de lo que le pediste a Shawn que hiciera conmigo? ¿Qué me ibas a decir antes de que Hayes nos interrumpiera? — me senté sin apartar mi mirada de la suya.

—No... No es nada importante, Mackenzie— bajó su mirada.

—No piensas dejarme con la duda ¿o sí?

Guardó silencio unos segundos mientras que a mi parecer intentaba cargar valentía, suspiró y me miró nuevamente.

—Sólo iba a decirte que... no sé qué habría hecho sin ti, que te quiero mucho y eres una muy buena amiga como para estar soportándonos sabiendo todo lo que te hemos hecho.

Una parte de mí no quería escuchar eso, pero finalmente no era una decisión mía.

Abrí la puerta guiñándome un ojo con mi puño y un ramo de rosas anaranjadas apareció ante mi rostro.

— ¿Usted es la señorita Mackenzie Jackson? — escuché la voz del vendedor.

—Si— titubeé recibiendo las flores.

—Firme aquí— me extendió su porta papeles y firmé donde me señaló.

—Gracias señorita— dicho esto se fue y me quedé mirando el ramo de flores algo extrañado.

— ¡Buenos días! — oí a Nash exclamar y bajar por las escaleras estirándose como un gato.

—Buenos días— le respondí y se paró junto a mí besando mi sien.

— ¿Y esto? — señaló las flores.

—No lo sé— me encogí de hombros.

— ¿No vas a ver la tarjeta?

Lo miré frunciendo mi ceño y saqué la tarjeta que estaba entre las flores.

—«Volveremos a ser la dupla que siempre está contra todo el mundo. Atte. Tu dinosaurio»— leí en voz alta y me reí— ¿Quién es "mi dinosaurio"?

—Amm... pues...— titubeó Nash— no lo sé.

Volteé la tarjeta. Decía; «Para mi Lagartija» y entre paracentesis aparecía "Dúo Lagartisaurio".

— ¿Dúo Lagartisaurio? ¿Soy parte de un dúo? — cuestioné y Nash se encogió de hombros.

—No lo sé, Mack, pero tengo una propuesta para ti— me sonrió.

—Te escucho fuerte y claro— le dije sonriendo.

— ¿Qué tal si subes a vestirte y arreglas tu cabello? Es un desastre— arrugó su nariz y yo reí.

—Te burlas de mi cabello, no se está comportando bien hoy por que, aunque no lo creas, intenté arreglarlo antes de bajar— lo señalé.

—Bueno, no funcionó, inténtalo otra vez— se rió.

—Ya ¿Y esa era tu propuesta? — alcé una ceja.

—No— se dio una palmada en la frente— es que tu cabello me distrajo— se rió acariciando mi cabello.