La desterrada › Old Magcon

52. Nada grave.

Ya todas mis cosas estaban allí, y a "todas" me refiero a mi cama y mi ropa.

Lina no aceptó la propuesta de vivir conmigo, dijo que se iría dentro de unos días y al parecer era para siempre, cosa que me apenó mucho.

Maho... ella sí aceptó, vivía con sus abuelos y esto era un paso para independizarse un poco. Ella si trajo todo, su cama, su ropa y algunos muebles obsequiados de sus abuelos que ayudaron a que la casa se viera acogedora.

Mackena. Al parecer está viviendo con Lucy, y espero que no me de alguna molestia.

Y con respecto a los chicos. Ellos estuvieron un día tratando de hablar conmigo, pero finalmente le dije a Dustin que por favor les dijera que me den un tiempo para pensar.

Hablé con Luke al respecto y me hizo razonar, «Si, son tus mejores amigos, diles que los perdonas... principalmente porque ellos cayeron en la trampa de Mackena, pero no les des un camino fácil, tu sufriste mucho más que ellos cuando tuviste el accidente, y no creo que sea fácil para ti perdonarlos así y ya, porque tampoco las cosas son así, ellos deben aprender bien la lección, y cuando estés segura de que ellos confían en ti plenamente, tu podrás confiar en ellos plenamente». La decisión ya está tomada.

—La cosa es que estuve pensando y... ya que el otro día me estaban pidiendo disculpas, pues... tengo una respuesta.

— ¿Y esa es? — dice Shawn.

—Que sí, los perdono... pero, no todo será fácil.

— ¿A qué te refieres con eso? — cuestiona Matt.

—Eso se ve con el tiempo.

—Yo me conformo con eso— dice Tay y corre a abrazarme, luego los demás se le unen.

Días después...

Miré a mí alrededor. Qué lindo era estar de vuelta, con todos esos desordenados chicos comiendo frituras que a propósito estaban en el suelo después del envase y los cinco segundos ya se habían transformado en media hora. Miré mi bolsa de Sour Cand y sonreí, luego miré a Matt y a Gilinsky que se peleaban por otra bolsa.

— ¡Bésalo Katia! — chilló Johnson y Maho y yo reímos.

— ¡No, no lo beses, Gale es tu hombre! — exclama Carter.

—No sé por qué dicen esas cosas si ya saben que Katia besa a...

—Sht— me calló Brent— no seas aguafiestas.

Definitivamente no había sido buena idea ver una película, pero el chantaje de Johnson es tan bueno, maldita sea.

—Chicos...— hable de nuevo, esta vez poniéndome seria.

—Calla, Mack— me dice Johnson y yo le lancé una mirada asesina a pesar de que no me estaba mirando.

Me puse de pie y desconecté la TV, haciendo que una lluvia de quejas cayera sobre mí.

— ¡A ver! — Grité y todos se callaron— ninguno está en posición de reclamarme nada, así que es mejor que me hagan caso.

Suspiré.

—Ya que queda bastante poco de vacaciones, me gustaría que aprovecháramos el tiempo e ir unos días a la cabaña en el lago que tienen...

— ¿Justo allí? — se quejó Gilinsky, interrumpiéndome.

—Sí, justo allí— lo señalé.

—Es que ese lugar nos trae malos recuerdos— murmuró Sam.

—Pero la solución no es dejar ese lugar abandonado, hay que ir y formar otros recuerdos nuevos y mejores. Además— tome aire— es un modo de ponerlos a prueba.

— ¿Qué tipo de prueba? — cuestiona Matt con miedo.

—Una prueba llamada confianza.

—Bueno, esta vez ya somos lo bastante grandes como para conducir— habla Cam con suficiencia.

—Si— asiento dándole la razón— pero yo quiero que tu hermana lo haga; Sierra. Ella también estaba ese día.

—Está bien— se encogió de hombros.

—Bien y ¿Cuándo sería el viaje? — pregunta Taylor un tanto emocionado.

—Este mismo sábado— sonreí— Maho y las chicas van.

Ella me sonrió.

—Okey, tenemos el resto de este día para preparar todo— dice Nash dando un aplauso y poniéndose de pie.

—Y será mejor que empecemos ya— habla Johnson y todos comienzan a ponerse de pie para organizarnos.

Puse algo de música para el ánimo. Algunos fueron por ropa a sus casas, cosa que no entendí. Gilinsky me dijo que luego me explicaría. Con Maho subimos a nuestras habitaciones y arreglamos nuestras cosas, luego yo fui a su habitación.

—Estás emocionada ¿eh? — me reí dándole un empujoncito y ella rió.

—Es que jamás había ido de viaje con amigos— confesó— generalmente no eran muchos los que tenía en la escuela.

—Bueno, pero, esta vez no es así— moví mis cejas de arriba a abajo— también va Jacob— le susurré y ella se sonrojó.

— ¡Ya basta! — Exclamó— avísale a las chicas.

—Claro, a Scarlet no— dije tomando mi móvil.

—Oye, ¿Por qué no le das una oportunidad?

—Es me cae como morderme la lengua, te juro que no la soporto, se hace la mosca muerta, se le insinúa a Nash, la otra vez la vi casi besándolo.

Ella me miró con sus ojos entrecerrados.

— ¿Qué? — dije sin entender.

—A ver Mackenzie, repasemos. Nunca me contaste que había engañado a Hayes con Nash.

—Ahora lo sabes.

—Segundo, ¿no se supone que deberías estar diciendo "pobrecito Hayes", en vez de "se le insinúa a Nash"?

Abrí mis ojos como búho.

—Y tercero, ¿No será que el que te gusta es Nash y no Matt?

Hice una mueca.

—A propósito, el día de la pijamada, Nash me dijo que yo le gustaba, pero no le creí mucho.

— ¡¿Y recién me lo dices?!— chilló y yo le tapé la boca.

—Sht, aún hay gente abajo— susurré.

— ¿Cómo es posible? — gritó en susurros— ¿Y por qué iba a ser mentira?

—Es que... tuve un recuerdo en el instante y no fue muy agradable.

— ¿Que recuerdo?

—Es que me dijo que yo le gustaba y como no le creí me dijo que había intentado olvidarme estando con otras chicas, pero cuando estaba con ellas me nombraba y hasta ahí llegaba todo. Okey, el punto es que el recuerdo que tuve fue una vez que Luke me dijo que los espiara y empecé por Nash. Cuando fui a mirar digamos que estaba en una situación algo fogosa, pues iba a hacer cosas con la chica— hice una mueca de asco— la cosa es que no alcanzaron porque empezaron a discutir y la chica apuntaba a mi ventana y después se fue enojada.

— ¡Entonces tú crees que te nombro a ti! — chilló emocionada y yo me di una palmada en la frente.

—Si— asentí.

— ¡Nash te tiene ganas! — gritó y yo me lancé hacia ella tapándole la boca.

—Cállate estúpida— me reí de vergüenza.

Ella seguía riéndose. Hizo un baile extraño comenzando a cantar.

— Te ama, te ama.

— ¿Quién ama a quién? — oímos una voz y nos sobresaltamos.