- ¿Y qué pasó? -
Lo mire una vez más. Tallaba mi nombre en aquel muro con una sonrisa ladeada bajo El Fuerte sol.
- Ya te dije, era de noche, salí y me perdí. Grité y solo Newt me encontró.
Me miró con los ojos entrecerrados mientras yo sólo trataba de mentir bien.
- No te creo.
- No me creas.
- Uh, la agresiva Kelsey está saliendo ¿eh? - se quedó un rato en silencio, pero no tardó en volver a hablar - Vale, supongamos que te creo, y te perdiste y gritaste y tarán, Newt te encontró. ¿Cómo acabaron abrazados?
Buena pregunta.
- Ah pues... Hacía frío, ¡sí! Hacía frío y... Ya sabes, calor corporal, son reglas de supervivencia - Alby estalló en risas y yo solo rodé los ojos - ¿No se supone que tú eres el sabiondo aquí? - Alby me miró divertido y siguió riendo.
- Ya... Supongamos que yo estoy en el bosque con Newt y hace mucho frío, ¿crees que nos abrazaríamos? - traté de ocultar una leve risa.
Rodé los ojos y miré mi nombre, que estaba tallado en la pared. Abrí mi boca indignada y Alby empezó a reír.
- ¿Lo hiciste a propósito?
- ¿Es una pregunta?
- Lo hiciste a propósito.
- Tal vez.
Sonreí irónicamente y me fui de ahí. Alby se puso a mi par.
Claro que lo hizo adrede, de tanto lugar en el muro tenía que poner mi nombre junto a Newt.
- ¿Estás enojada?
- No es eso Alby, solo que... Estoy muy confundida.
- Te veo en el bosque en 1 hora, gástala bien - me guiñó un ojo y se fue de ahí dejándome sola.
Emprendí mi camino, Alby aún no me asignaba ninguna tarea, así que no tenía nada que hacer, en la hora que me restaba, porque seguramente después de esta hora libre, ya tendría asignado un trabajo por Alby.
Vi a Newt en los cultivos hablando con Winston. Me acerqué. Newt cosechaba y me daba la espalda. Winston me miró y alzó una ceja mirando a Newt sin que el se diera cuenta y lo señaló. Fruncí mi ceño sin entenderle y después Winston cerró sus ojos y sacó sus labios dándole besos silenciosos al aire.
Cuando Newt iba a voltear, increíblemente Winston habló.
- ¡Kelsey!
Saludó Winston, yo solo le sonreí y Newt volteó.
- ¿Podemos hablar?
Le pregunté agradablemente.
- Creo que yo... Mejor me voy.
Winston nos dejó para que habláramos, eres un amor Winston, pero no eres mucho mi tipo.
- ¿Por qué me estás evitando? -
Me pare enfrente de él y ni siquiera me prestaba atención, seguía haciendo sus cosas.
- No lo hago.
Su voz era dura y áspera.
- Sí lo haces.
- Estoy trabajando. ¿Me permites?
Abrí la boca indignada y corrí la mirada.
- ¿Disculpa?
- ¿Qué quieres Kelsey? No tengo tiempo.