Subí del edificio y por el otro lado bajé, por unas escaleras que me llevaron a un callejón.
Me senté abrazando mis piernas y escondí mi cabeza entre mis rodillas.
Ahora estaba sola, literalmente. No sé estar sola, he aprendido a estar acompañada, nunca a estar sola, solo en el laberinto... Solo en el laberinto... Cuando aún no conocía a Thomas...
Thomas... Quiero que esté aquí conmigo, no puedo hacer esto sola, en verdad no puedo. Lo necesito, es mi hermano, mi hermanito, lo quiero aquí, lo quiero aquí conmigo.
Él tenía razón, soy un estorbo, soy un fraude en todo lo que me propongo. Si CRUEL me encuentra no me sorprendería... CRUEL ¿Y si vuelvo a CRUEL? ¿Y si les digo que se fueron justo en el sentido contrario al que se fueron? Sí, no es una mala idea.
¿Qué pasaría conmigo? Seguirían experimentando, pero ya me da igual. No me interesa.
Solo necesito ubicarme para volver.
Me puse de pie, pero un jalón me raspó todo el muslo.
- Ahh maldición - me agaché para ver qué tal estaba la herida, no era una como para desmayarse, pero era un poco profunda.
- ¿Kelsey? - esa voz me dejó helada, estaba segura de que quería golpearlo a más no poder, pero a la vez también abrazarlo.
Me paré bien y lo miré.
Tengo ganas de golpearte.
Caminó, más bien, corrió rápidamente hacia mí y al momento de querer abrazarme lo empujé.
- ¡Eres un idiota! - pero claro, como mi fuerza es muy poca a comparación con la suya, no logré moverlo ni un centímetro.
- Kelsey - me abrazó aprisionándome de mis brazos.
Estaba enojada, estaba muy enojada, tenía tantas ganas enojadas de estar con él.
- Pensé que... Vi la linterna tirada y pensé que tú... No me vuelvas a hacer esto - Y ahí fue cuando exploté
- ¿No me vuelvas a hacer esto? ¿NO ME VUELVAS A HACER ESTO? - lo empujé con toda mi fuerza logrando alejarlo de mí - ¡Eres un tonto! ERES TAN TONTO COMO PARA NO DARTE CUENTA DE QUE NO HAY UNA SALIDA, CRUEL NOS VA A SEGUIR BUSCANDO, NOS SEGUIRÁN BUSCADO HASTA QUE NOS ENCUENTREN. Y NO VAN A PARAR. ¿POR QUÉ SEGUIR HUYENDO?
No pude, no pude contenerme y sigo sin poder hacerlo.
Thomas se quedó un momento en silencio.
- ¿Te estás escuchando?
- Sí.
- ¡Te estás escuchando!
- ¡Sí!
- ¿¿TE ESTÁS ESCUCHANDO??
- QUE SÍ.
Thomas se quedó mirándome negando con la cabeza y con sus manos en la cadera.
- Por Dios Kelsey, estás mal.
- Siempre estoy mal, siempre soy la que arruina las cosas. Créeme, me lo has dicho tú, Newt, Sartén, Gally. TODOS.
- Kelsey, yo no... Yo nunca te quise decir eso, yo, Kelsey, te amo, eres mi hermana, las palabras que te dije, estuvieron mal, si pudiera regresar el tiempo...
- Pero no puedes, y ya, lo dijiste.
- Kelsey ¿Podrías dejar de ser tan fría? ¡Te creí muerta!
- No me digas, porque soy muy estúpida para sobrevivir ¿No? - los dos estábamos viéndonos enojados.
- Me estás diciendo que regresemos a CRUEL.
