_________.
Ha pasado una semana y media desde que trabajo en la casa Bieber, me encuentro muy feliz con el trabajo que tengo. Melody y Madison son unas pequeñas muy dulces, su comportamiento es muy bueno cuando estoy con ambas.
Con Jake hemos estado comenzando una relación de amistad, estos días he estado aprendiendo a conocerlo y me he dado cuenta que es un muy buen chico, se que a futuro llegaremos a ser grandes amigos.
Y el señor Bieber, bueno, el esta siendo un muy buen jefe conmigo, desde el día en el que llego unos minutos mas tarde de lo que correspondía, comienza a llegar temprano a casa. Siempre se preocupa de mi.
En el sentido de que me pregunta si me siento cómoda en la casa, con las niñas, con Jake y siempre le contesto con un si, es muy dulce conmigo. Y eso me preocupa bastante, durante estos días he pensado mucho en el, y no se la razón.
Cada vez que voy a darme una ducha, sus ojos, su nariz, sus labios y todo de el se me viene a la mente de inmediato, o cuando estoy a punto de ir a dormir me pasa lo mismo. No se que diablos me esta pasando.
No le he contado nada a Anastacia, no quiero decirle nada hasta estar segura de lo que me esta pasando, he pensado que quizás este confundida pero es imposible. Yo estoy con Zac, el es el hombre que amo, ¿cierto?.
Dios, no se ni porque lo dudo, es obvio que lo amo, es un chico increíble, no puedo estar confundiéndome yo misma con un hombre que casi me dobla la edad, que es el jefe de mis padres y también es el mio.
Lo dejare en que solo son tonterías mías, pensamientos tontos que tengo en mi cabeza, quizás no me pasa nada y yo pensando y pensando comienzo a meterme cosas absurdas en mis sentimientos, tengo que dejar de pensar en eso.
Ahora estábamos con Zac en mi casa, durante esta semana no pude verlo mucho debido al trabajo, pero hoy, como es sábado, hemos decidido en pasar todo el día juntos. Mis padres, como lo quieren, lo invitaron a almorzar y cenar.
Ahora estábamos recostados en el pasto del patio trasero mientras mirábamos el cielo a la misma vez.
-¿Que tal el trabajo, cariño?-pregunto mi novio sentándose en el pasto.
-Bueno-imite su acción-es un buen trabajo, las niñas son muy dulces conmigo.
-Me alegro-sonrió-¿tu jefe no es un ogro?.
Diablos, lo que menos quiero es hablar del señor Bieber ahora.
-No-solté una pequeña risa-el es muy genial conmigo, es un buen jefe.
-Que bueno, mi jefe realmente es un ogro, no lo soporto mas.
Zac también había comenzado a trabajar, en un Starbucks que estaba a unas calles de la universidad donde estudiábamos. Le pagaban un sueldo bastante bueno, su horario es bueno, el único problema es su jefe.
-Tranquilo amor, solo serán por estos meses que estemos de vacaciones.
-Si-tomo mis mejillas-te extrañaba tanto bebe, lo único que quería estar contigo.
Sonreí por sus palabras, es tan tierno y romántico.
-Yo también amor, me alegra que estemos en el día de hoy juntos.
Beso mis labios cortamente.
-Te amo mucho.
-Y yo a ti.
Antes, sus palabras me hacían llegar al cielo, me hacían sonreír y me daban miles de mariposas en mi estomago pero ahora, eso era muy leve. Le respondía el "te amo" muy fría, sonreía muy poco y casi no tenia mariposas dentro de mi.