Justin.
Sentí como comenzaban a moverme, abrí mis ojos lentamente y mire a mi lado encontrando a mis dos hijas en pijama mirándome divertidas.
-Papa despierta-dijo Melody.
-Dios-murmure-¿que hora es?.
-Son casi las dos de la tarde.
Abrí mis ojos de golpe.
-¿Que?-grite-pero como, ¿y Jake?, ¿y ustedes como desayunaron?.
-Tranquilo-me dijo Madison-Jake nos dio de desayunar.
Antes de hablar, Jake entro a mi habitacion con una bandeja en sus manos donde tenia un café, un vaso con jugo de naranja y unas tostadas.
-Buenas tardes-sonrió.
Me sente en la cama mientras mi hijo ponía la bandeja sobre mis piernas.
-Gracias-le di una sonrisa.
-Niñas-mis hijas miraron a su hermano-¿podrían dejarme conversar con el papa?.
Ambas asintieron saliendo de la habitacion.
-¿Como estas?-pregunto Jake.
-Bien, no se porque dormí tanto, ¿que me paso?.
-Bueno, anoche te tomaste una pastilla para dormir porque no podías conciliar el sueño y también me dijiste lo que el tío Alex te dijo de Amelia, no puedo creer lo que hizo.
-Santo Dios-dije sacando la bandeja de mis piernas y dejándola en la mesita de noche-hoy iba a ir al departamento de Amelia, necesito que cuides de tus hermanas hasta que vuelva, ¿si?.
-Mejor dicho, prepara a tus hermanas-lo mire confundido-papa... hoy se casa ________, ¿lo habías olvidado?.
Mi corazón se estrujo.
-No... por favor no me lo recuerdes.
Entre al baño de mi habitacion, me despoje rapidamente de mi ropa, abrí al regadera y entre en ella para ducharme. Tarde unos minutos antes de salir de el, me vestí con unos vaqueros con unos agujeros en algunas partes del pantalón, una remera gris sin diseño y unos zapatos del mismo tono que la remera.
Apenas estuve listo, salí de la habitacion con mi celular y las llaves de mi auto en mis manos, baje las escaleras lentamente donde mis hijas veían televisión.
-Niñas-me miraron-voy a salir, su hermano las va a preparar para... el matrimonio de... ________, ¿esta bien?.
-Si papa-respondieron con una sonrisa.
Me di media vuelta encontrando a Jake.
-¿No vas a desayunar?-me pregunto mi hijo.
-No, debo hacer algo muy importante ahora, por favor cuida de tus hermanas, cualquier cosa llámame, no lo dudes y también, ponlas lindas para el matrimonio, volveré en una hora.
Mi hijo asintió.
-Suerte-murmuro dándome palmadas en mi espalda.
-Gracias hijo.
Camine a la entrada de mi casa, salí de ella acercándome rapidamente a mi auto, me subí en el, prendí el motor, me puse mis lentes de sol de color negro y comencé a conducir hacia el departamento de Amelia.
Me estacione en la entrada, baje del auto y camine completamente serio a la entrada del edificio, no había nadie en portería así que solo camine al ascensor. Las puertas se abrieron en el piso numero seis, me acerque de inmediato al departamento.