El olor a alcohol mezclado con cigarrillo invadía mis fosas nasales. Había chicas bailando sobre las mesas, chicos jugando Keg Stand y demasiadas personas ebrias. Definitivamente la fiesta se había salido de control.Connor y Greg estaban jugando Beer Pong, por lo que nosotras decidimos esperarlos en la barra. April ordenó cinco caiproskas para brindar por nuestro último año, y yo pedí una coca-cola para acompañar. Detesto el vodka, y casi nunca suelo beber alcohol. Sin embargo, hoy era una ocasión especial.
— ¡Por nuestro último año! — dijo Maddie, alzando su copa.
— ¡Salud! —correspondimos las demás. Tomé un pequeño trago de mi bebida, y no pude evitar asquearme. Era asqueroso. April rió y giramos para mirar la competencia de Beer Pong. Connor estaba sonriente, posiblemente había ganado. Al notar mi mirada, me guiñó el ojo. Sonreí y oculte mi rostro tras mi cabello, ya que no quería que notaran que mis mejillas ardían.
— ¡Vamos a bailar! — dijo Cam, dirigiéndose a la pista. Rápidamente todas la seguimos y comenzamos a movernos al ritmo de la música.
Luego de unas cuantas canciones, estaba muriéndome. Los pies me dolían a más no poder y la cabeza me daba vueltas. Me senté en la barra y ordené un vaso de agua. Estaba chequeando mi móvil cuando alguien giró mi taburete.
— ¿Cansada? — preguntó el castaño, tomando asiento a mi lado.
Santa madre.
— -Si, mucho— respondí, tratando de esquivar su mirada.
— Estás hermosa esta noche — sonrió y mordió su labio inferior, causándome un nudo en el estómago.
Santísima madre.
— Gracias —contesté, aclarando mi garganta y tratando de esquivar su mirada.
— Oye Brooke, me preguntaba si alguna vez tú y yo podríamos salir a tomar algo o ver una película.
-No lo se- respondí. No sabía que decir, aunque Brad fuera extremadamente sexy, no quería nada con él.
— Bueno, si me dieras una oportunidad, podrías decidirte — dijo sonriente. Reí; este chico no se da por vencido — Tu avísame, ¿vale?
— Vale — respondí finalmente. Brad se alejo, y alguien ocupó su lugar ¿Qué acababa de pasar?
— Hola linda.
— Hola —respondí a Connor, quien se sentó a mi lado.
— ¿Te encuentras bien? Estas pálida.
— Debe ser el alcohol. No suelo beber; estoy bien— mentí.
-— Greg está coqueteando con una chica, por lo que solo te tengo a ti — dijo riendo.
— ¿Estás diciendo que soy tu segunda opción? — pregunté bromeando.
—Sabes que no me refería a eso —rió — Voy a la pista, ¿no vienes?
— En un minuto— respondí; aún necesitaba aclarar mis ideas.
La propuesta de Brad me había dejado un poco desorientada. Nunca había tenido que rechazar a alguien, y menos a un chico tan guapo como él. Pero no puedo salir con Brad; primero que nada, es muy mujeriego y su fama de rompecorazones se acrecienta chica tras chica; tan solo le hace falta un letreto que diga "Cuidado" en el medio de su frente. Segundo, es uno de los mejores amigos de Harry; y tercero, no quiero ningún tipo de relación en este momento; al menos no con él.
Tomé la caipiroska y bebí un gran trago, arrepintiéndome al instante.
No, definitivamente no me gusta el vodka.
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Destined | h.s |
Teen Fiction"-¿Pero qué te sucede?- le pregunté con impotencia - ¡Tú no tienes ningún derecho a mandar sobre mi! -¡Solamente intentaba protegerte!-dice mientras me mira fijamente -¡Tú no tienes que protegerme! ¡Yo sé cuidarme sola Harry! Además no somo...