Save me From The Dark

Capitulo 58: Fuera de Lugar

Helena Bertinelli, un placer...-. Dijo ella con un tono nada confiable extendiendo su mano para que la estrechara. No se por qué pero no me agradaba esta chica, era bastante alta, de ojos claros, casi parecía una supermodelo, tenía un rostro perfecto.

-__________ Thompson-. Me presenté de manera 'educada'.

-No he oído de ti...-. Dijo ella y yo no supe que quería decir con eso, pero entonces mi atención se desvió a Oliver.

-¿Ah si? Que interesante porque yo no he escuchado nada de ti tampoco...-. Le dije entonces mirando a Queen como para que me explicara quien era y qué hacía aquí.

-Helena es una vieja amiga que nos ayuda con un caso...-. Dijo él, explicándolo.

-Qué genial-. Admití con una sonrisa falsa. Había cierta tensión en el ambiente, pero Oliver simplemente ignoró la presencia de todos los demás en la habitación y se acercó a mí para tomarme por la cintura, apartarme un poco del grupo y de manera sorpresiva darme un cálido beso en los labios. Debo admitir que al principio me tomó bastante por sorpresa ya que Oliver no era de esas personas que demuestran afecto en público, pero aún así me alegró que lo hiciera.

-Lamento no haberme comunicado contigo...-. Dijo acomodando un mechón de cabello detrás de mi oreja. -¿Qué tal tu día?-. Preguntó entonces.

-Interesante...-. Dije con una media sonrisa recordando al tipo extraño pero agradable que habíamos conocido.

-Oliver, lamento interrumpir pero hay señal de Doyle-. Gritó Felicity desde el escritorio y todos fueron a ver detrás de ella, el mapa de Starling City que se mostraba en la pantalla.

-Tenemos que movernos...-. Dijo Helena tomando una ballesta que estaba sobre la mesa y una máscara, me di cuenta entonces que llevaba un traje de cuero púrpura, al estilo de Arrow, de hecho parecía la versión femenina de él.

-No irás a ningún lado Helena-. Le dijo él tomando el arco y la flecha... sacaré información, no asesinaré a nadie esta noche-. Le reclamó él deteniéndola.

-No matare a nadie Oliver... solo sacaremos información, quiero estar ahí para ver que dice ese imbécil-. Dijo ella ignorando las ordenes de Oliver y continuando su camino hacia afuera. Oliver solo rodó los ojos y la siguió sin decirle más nada.

-Volveremos en una hora-. Dijo Oliver despidiéndose a lo lejos.

-30 minutos-. Le corrigió Helena y éste simplemente rodó los ojos.

-Dios... parecen un viejo matrimonio-. Dijo Felicity rodando los ojos, pero luego cerró la boca y me miró –No de esa manera... no de una manera romántica, solo ya sabes...-. Aseguró ella enredándose como solía hacerlo.

-Esta bien, no me molesta -. Le expliqué -¿Quién es Doyle?-. Pregunté y ella me mostró en la pantalla a un hombre irlandés, calvo, de unos 40 años con un traje, tenía cara de estar en la mafia.

-Estafador, ha robado a media ciudad... ricos y pobres-. Me mostró enseñándome una lista de las personas e industrias a las que le hombre había engañado.

-Thompson & Co...-. Dije acercándome para mirar la lista –Es el conjunto de empresas de mi padre...-. Agregué volviendo a leer el nombre de la lista -¿Ese imbécil le ha robado a la empresa de mi padre?-. Pregunté con los ojos como platos.

-Si... lo siento... no sabía-. Dijo la chica rubia.

***

Después de un rato en ese lugar las cosas se habían tornado bastante extrañas, Oliver y Helena habían vuelto de su pequeño interrogatorio con resultados satisfactorios, pero ahora parecía que yo estaba completamente fuera de lugar, Roy y Dig habían ido a resolver un problema de maleantes a un par de calles del club, nada complicado, Felcity intentaba rastrear el teléfono celular del hombre estafador, Oliver y Helena practicaban y entraban algo de arquería, yo estaba ahí sintiéndome completamente inútil...

-¿Puedo intentarlo?-. Pregunté acercándome al par de arqueros.

-No quiero que te lastimes...-. Dijo Oliver y lo miré de mala manera, ¿Por qué Helena si podía ser una heroína y yo no?, me pregunté a mi misma, quizás estaba algo celosa de ella...

-No me lastimaré Queen-. Le dije quitándole el arco y la flecha de las manos.

-Bien... intenta darle a aquella marca en la pared...-. Me indicó él, acercándose un poco a mí –Baja el hombro...-. Indicó colocando su mano en mi hombro –Dispara-. Me dijo y solté la flecha pero ésta no llego ni a un par de metros de distancia...y yo suspiré frustrada.

-Creo que la arquería no es lo tuyo...-. Me dijo Helena con una media sonrisa, por algún motivo creo que ella me odiaba.

-Requiere tiempo...-. Me dijo Oliver guiñándome el ojo.

-Supongo...-. Respondí con una sonrisa bastante falsa y forzada, dándome media vuelta para volver a donde estaba hace un par de minutos, sentada junto a Felicity viéndola presionar un innumerable montón de teclas que no entendía, solo me senté y me crucé de brazos... a lo lejos podía escuchar a Oliver y Helena bromear y llevársela de maravilla.

-¿Todo bien?-. Preguntó Smoak sin despegar los ojos de la pantalla.

-Si...-. Mentí –De hecho creo que ya es algo tarde...-. Dije tomando mi bolso, eran alrededor de las 10:30 de la noche -¡Adios!-. Grité mientras subía las escaleras, quizás estaba algo cansada, pero ni siquiera estuve de humor para despedirme de cerca de Oliver.

-Creo que tu noviecita está molesta...-. Dijo Helena en un tono de burla.

-No le digas así...-. Mencionó Oliver pensando que ya era algo tarde como para que ___________ se fuera sola.

Salí del club, en la parte frontal estaba la habitual línea de personas esperando para entrar, Tommy había hecho un buen trabajo promocionando el lugar y supongo que el nombre de Oliver ayudaba a que las personas vinieran, mi teléfono celular comenzó a sonar, era Oliver... pero ignoré la llamada en ese momento, hablaría con él mañana.

Caminé un par de cuadras y de hecho todo el lugar estaba bastante oscuro, apresuré el paso para salir al menos de The Glades, que era la zona mas peligrosa de todo Starling, ahora que lo pensaba, debí esperar a que Oliver o quizás Dig me acompañaran a casa.

Iba a paso apresurado cuando un grupo de cuatro personas frente a mí me hicieron detenerme de repente en seco.

-Hola linda... ¿a dónde crees que vas?-. Preguntó uno de ellos haciéndome dar un paso atrás, en ese momento estaba muy asustada, mi corazón comenzó a latir a mil por hora.

-¿Por qué tan sola tesoro?-. Preguntó el otro... Yo no dudé dos segundos en echar a correr, estaba como a cuatro cuadras del club, podría regresar... o al menos eso pensé hasta que uno de los hombres me alcanzó y me tomó del brazo bruscamente para hacer que me detuviera.

-¿Crees que puedes huir?-. Preguntó con una sonrisa macabra en el rostro.

-Suéltame imbécil-. Le dije intentando forcejear para que me soltara, pero no podía lograr que me quitara sus manos de encima.

-La srta. Dijo que la soltaras...-. Dijo una extraña voz detrás de nosotros.

-¿Quién demonios te crees?-. Preguntó uno de ellos a la silueta del hombre que no se podía distinguir bien por la escasa luz.

-Alguien con quien no debiste meterte...-. Aclaró el hombre y en dos segundos, en apenas un abrir y cerrar de ojos pude ver como con mucha facilidad golpeaba a todos y los dejaba noqueados, completamente inconscientes en el piso. Yo me quedé en completo shock atónita en silencio, había caído al suelo cuando el maleante me había soltado bruscamente a causa de que el hombre casi lo asesina.

-¿Está bien Srta. Thompson?-. Dijo el hombre acercándose, extendiendo su mano para ayudarme a levantarme y pude ver su rostro, no podía creer lo que acababa de hacer, era él... el hombre con el parche.

-Joseph... ¿cómo rayos...?-. Pregunté sin siquiera poder terminar de articular la pregunta. ¿Quién demonios era este tal Slade Joseph Wilson...?