9.Esto no es normal

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Toco el timbre de la puerta para meter las manos en los bolsillos y esperar mientras observo mis zapatillas. La puerta se abre para después introducirme dentro de la enorme casa rapidamente.

- Cariño - dice mi madre con alegría para besar mi mejilla con ansia y darme un fuerte abrazo - Ven, siéntate - dice mientras me arrastra hasta el salon donde se encuentra mi viva imagen, mi padre.

- Hola - dice levantándose para darme un abrazo - hace mucho que no te pasabas por aquí - finaliza con una sonrisa sincera.

Mi madre a los pocos minutos de mi llegada y con tristeza se va de la casa a su puesto de trabajo, no antes de hacerme prometer que iré más seguido a verla. Despues de aquello nos quedamos Bayron y yo en el salon en un silencio bastante cómodo la verdad.

- Tengo que contarte algo - digo un poco inseguro rompiendo el silencio, el solo asiente dándome paso para hablar - el otro día fui a ver a kyle - suelto rápidamente mientras su mirada se clava en la mía con sorpresa.

- Y que paso hijo? Estas bien? - pregunta dudoso mientras frunce su ceño.

- Sí, sólo que recordé cosas que no me gustaría haber recordado pero ese es otro tema... - suspiro cogiendo aire, el aire que voy a necesitar después - el me atropello - afirmó mientras veo como su semblante se transforma serio y enfurecido a la vez.

- Ese hijo de puta... - dice mientras se levanta y empieza a agarrarse la cabeza con frustración - pagará por ello te lo juro - dice con seguridad.

Despues de unos minutos de ira incontenible de mi padre en la que realmente da miedo y no precisamente por todas las palabras descalificativas que suelta contra kyle consigo calmarle, parece que vuelve a su sano juicio.

- Alguien te quiere conocer - dice con media sonrisa a lo que yo solo pongo mi cara de duda... pasa de 0 a 100 en segundos, es como una bomba pienso para mi mismo.

- Y bien? - contesto intrigado ante su respuesta.

- Tu abuelo Kennedy, el padre de tu madre, tiene muchas ganas de conocer a su único nieto varón - finaliza mientras en sus ojos se ve la nostalgia.

- Eso... estaria muy bien - digo con una sonrisa sincera.

Aveces me cuestionó como de caprichosa es la vida... Un día no tienes nada ni a nadie y al día siguiente todo cambia, gracias a dios en mi caso cambio a mejor. Creo que esto es lo que siempre ansie, una familia. Esas personas que de forma incondicional lo dan todo por ti...

- Ves a ver a tu hermana anda, esta en su habitación seguro que quiere verte - dice con media sonrisa para después darme un toque en la espalda.

A paso descuidado subo para llegar hasta donde se sitúa su habitación. Unas voces femeninas captan mi atención haciendo que me plante en la puerta a escuchar esa comversacion. Los hombres también hacemos estas cosas algún problema?

- Oh no, sabes que Unay esta cañón - dice esa voz tan familiar.

- Claro, porque estas coladita por cada uno de sus huesos - dice Cinthia entre carcajadas.

- Ni de coña vamos, esta tremendo... eso no lo voy a negar pero eso son palabras mayores - dice nerviosa

- Por eso hablas con el todos los días? O por eso siempre hablas de él? - pregunta Cinthia de forma indiscreta cosa que hace que mis puños se cierren con fuerza.

- Por eso quedo de mínimo 2 veces por semana con el - afirma con alegría.

- y con izan que? Sabes que es el que te tiene loca- pregunta Cinthia dudosamente.

- Nada, entre nosotros nunca pasara nada - dice de forma cortante - No es ni será nunca mi tipo, y no quiero hablar más de él - termina de decir amargamente.

-Touche - dice Cinthia intentando calmar la situacion.

Mi cara esta algo desconfiguarada por las confesiones, en que cojones pensaba yo cuando creía estar jodido por ella? Más bien molesto abro la puerta sin antes llamar. Mi mirada viaja hasta Nahiara para mirarla dolido, aunque dolido porque? después sonrio a mi hermana ignorando todo lo demás.

- Hola enana - digo mientras revuelvo su pelo para después tirarme a la cama de un salto.

- Ey y ese buen humor? - dice pícara a lo que yo río, que viva la maldad.

- Tuve una noche movida ya sabes - afirmó para después guiñarla el ojo. Estoy tan sumamente molesto que me da igual molestar a Nahiara... es más, se lo merece.

- Detalles obscenos no... porfavor - dice Cinthia negando con la cabeza con una carcajada.

- Era una morenaza... me exprimio - digo entre carcajadas para observar la mirada furiosa de Nahiara.

- Ya es suficiente - dice Nahiara enfadada - me voy - grita para coger su bolso y salir sin despedirse de nadie.

- Y a esta que la ha picado - pregunto molesto por su actitud a sabiendas que yo he provocado esto.

- No lo se, lleva así desde ayer por la noche... - confiesa algo confusa aún.

- Se porque esta así, bueno creía... - digo notoriamente molesto al recordar sus palabras - Ayer casi pasa... - digo brevemente a esperas de que lo entienda.

- El que? - dice dudosa con media sonrisa intrigada.

- Ya sabes... - vuelvo a insistir con la intención de no dar detalles.

- No te entiendo - dice riéndose - se claro - finaliza mientras niega con su cabeza.

- Ayer casi lo hacemos, joder - digo frustrado - pero pare la situación y se molesto, o eso creia... ahora entiendo que no, que era su calentón del momento - termino de decir enfadado.

- No... - dice mientras posa sus manos en la boca y niega frenéticamente - Lo sabia - dice con media sonrisa para salir corriendo y dejarme plantado ahí como un idiota.

Despues de despedirme de mi padre vuelvo a casa, Rodrí no está asique supongo que estará con Sam. Algo dudoso todavía abro el cajón de mi mesilla de noche para encontrarme el número de la morena de las carreras.

Llamar mi atención la llamo, pero no se si para esto... bueno que jodida mierda digo. Cojo mi móvil y tecleo su número para pulsar el botón de llamar. Despues de un par de pitos su voz gritona se hace notar.

- Halo? - dice medio gritando para no variar.

- Hola guapa - digo con mi voz ronca - Sabes quien soy? - pregunto indiscretamente sabiendo que no se olvidaría de mi tan facilmente.

- Cómo iba a olvidar tu voz... - dice en lo que parece más un gemido que un suspiro.

- Nos vemos? - pregunto, no quiero andarme con rodeos de citas, helados y mierda, esto va a ser un aquí te pillo aquí te mato, sin contemplaciones ni miramientos.

- En mi casa? - dice con voz sensual para captar mi atención cosa que no resulta muy eficaz.

Despues de que me diera su dirección cojo mis cosas y me voy en moto hasta allí. Unos minutos después me encuentro enfrente de una casa baja, a pocos minutos de la de Nahiara... joder.

Siempre su nombre vuelve a mi cabeza, no se como lo hago ni como explicarlo. Quiero sacarla aunque sea cinco minutos de mi cabeza para poder pensar con claridad... pero eso nunca sucede. Esto no es normal...

IMAGEN MULTIMEDIA CINTHIA

IzanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora