Enamorando A La Mamá De Mi Hija NALU

¿Prometida?

La recepción era en el mismo salón donde Levy y Gajeel se habían casado, solo que ahora el ambiente era más formal, la élite de Fiore reunida en un mismo lugar.

Lucy: ¿Levy cómo haces para mezclarte entre esta gente estirada?

Levy: Sé natural, sonríe y si no te hacen caso ignoralos.

Lucy: Levy.... Tengo pánico.

Levy: Vamos Lu-chan, Natsu está contigo él te ayudará.

Lucy: Sí como no, de seguro me dejará por alguna conquista.

En eso Natsu dejó de hablar con uno de los empresarios más conocidos en la industria, Macao, el cual quería que la empresa de Natsu apoyará a su hijo Romeo con un proyecto.

Macao: Muchas gracias Natsu, espero tu llamada.

Natsu: De nada.

Natsu se acercó a Lucy y Levy que estaban pláticando del embarazo. Notó preocupada a Lucy así que la tomó de la mano y se la llevó con él a presentarla formalmente.

Natsu: Perdón Levy te la robaré un momento debo presentarla para que se sienta en ambiente.

Levy: No te preocupes yo buscaré a Gajeel.

Natsu llevaba a Lucy del brazo, era tan vergonzoso para ella caminar de esa manera pero a la vez se sentía segura.

Lucy: Natsu ¿Qué haces? Dejame en la mesa por favor me da verguenza hablar con esta gente.

Natsu: Te dije que haría que la pasarás bien así que primero te presantaré.

Lucy: ¿Y cómo piensas presentarme sí nos somos nada más que amigos?

Natsu: Amigos... Que tendrán un hijo así que por favor esta noche sé mi prometida ¿ok?

"Amigos" esa palabra le dolió a Natsu pero se había propuesto conquistarla y no se iba a rendir.

Lucy: ¿¡Cómo!?

Natsu: Así, por favor solo esta noche... No quiero decir que nos emborrachamos, nos drogarón, no nos acordamos de nada y que hoy seremos padres.

Lucy: ¿Natsu pero sí decimos eso no saldrás con nadie ahora?

Natsu: ¿Y quién dice que vine a la fiesta a hacer conquista? Mi prioridad es mi bebé y tú.

Lucy: ¿Yo?

Natsu: Estabas triste o estás, no sé y quiero cambiar eso, eres la mamá de mi bebé además yo....

En ese momento Natsu fue interrumpido por una persona muy conocido para él; demasiado, que al verla solo se quedo sin palabra y verguenza, no solo por quien había sido en su vida sino que venía acompañada de su esposo.

Sra. Grossman: ¡Natsu Dragneel! Tiempo sin verte mi niño, ven aquí.

Natsu se vió envuelto en un abrazo muy fuerte por parte de la Sra. Grossman, y el esposo de la misma se acercaba también a saludar a la pareja de jóvenes.

Natsu: ¿Qué.... Tal...? Sra...... No ....p.ue..do...

Sra. Grossman: Me alegró tanto de verte y vén acá señorita no sea tímida.

Tomándola de la mano y notando el vientre de Lucy.

Sra. Grossman: Belleza de mujer, Natsu Dragneel.

Sr. Grossman: Dragneel, tiempo sin verte.

Se estrecharón las manos y el Sr. Grossman miró a Lucy también con una gran sonrisa.