Ya todos habían comenzado a cambiarse y prepararse dentro de poco saldríamos al punto de encuentro donde estaría la batalla.
Iremos encapuchados, ya que yo no puedo ser vista o seré a la primera que quieran matar y si voy yo sola con máscara sospecharan, además que no es normal que una princesa asista a las batallas, no se dio nunca y esperó nunca se de otra vez. Todo seguía nevado ya que Edward así lo deseo, él dijo sólo esto cuando le preguntamos el porqué de la nieve:
"La nieve significa un sentimiento triste, el clima mayormente se basa en mis sentimientos, por eso está nevado".
Luego de eso sólo se iba escapando de nuestras interminables preguntas._¿No te despediras de Alex? - Me pregunto Sain-.
_No, es mejor así - Le mire con una triste sonrisa-.
_ Comprendo, entonces en marcha - Así fue como comenzamos a caminar.
Nuestro destino era un poco lejos pero preferíamos caminar para tener más tiempo de tranquilidad todos estábamos bien armados, con capuchas y pañuelos cubriendo casi nuestra cara, sólo se podían ver los ojos, esto sería difícil, pero no imposible.
_Señorita, para antes de que lleguemos, ¿no quiere dar unas palabras de aliento para los guerreros? - Me habló Xavier-.
_ Tienes razón, quizás sea bueno animarlos - Estuve de acuerdo - Señores escucharme soy su princesa, hoy estamos aquí para luchar en mi defensa por el intento de asesinato de nuestros enemigos, se que quizás muchos morirán hoy y se que es mi culpa que estemos en esta guerra, pero en este momento estoy aquí con ustedes para pedirles ayuda, necesito que luchen a mi lado para poder terminar con esto se una buena vez, prometo que luego podrán seguir el camino que ustedes elijan, sólo les pido ayuda esta vez.
Todos comenzaron a gritar muy animados ante mis palabras, algunos me gritaban líder, otros creadora y me estan agradeciendo el hecho de ser vampiros, parecía que ahora estaban más que felices por morir a mi lado y también luchar.
Yo estaba segura de que podía confiar en ellos, podía morir a su lado con honor, aunque no me gustaría verlos morir por desgracia sabía que en una guerra habría muchos muertos.
_Señorita, casi llegamos, ¿Puedo pedirle algo? - Me habló Sain-.
_Claro, ¿de que se trata? - Sin poder reaccionar Sain bajo mi pañuelo para luego besarme con suavidad y delicadeza como si de una rosa se tratara.
Sin embargo fue apretando más mis labios haciendo que corresponda su beso, cuando me soltó quede con ganas de más, fue extraño. Cuando ya estábamos separados pude ver que tenía una sonrisa triste, luego se colocó su pañuelo y el mío, comenzando a caminar en dirección al resto que se habían adelantado.
Últimamente había una gran distancia entre él y yo, pero sentí por un momento que esa distancia se rompió, ojalá fuera así. El era mi sirviente de mayor confianza así que lo necesitaba a mi lado todo el tiempo posible.
_ Lindo beso Amira - Me habló mi tía-.
_ Alia, no empieces - La amenacé con mi mirada-.
_ Alia tiene razón, para el colmo acabas de romper mi corazón - Alia y Eric comenzaron a bromear sobre el beso que tuve con Sain, por otro lado Nicolás, Edward y Xavier estaban haciendo apuestas sobre cuántos hombres podrían matar una vez que estuvieran en combate, Sain hablaba con algunos de los guerreros y yo sólo podía preguntarme cómo estaba mi pequeño, más cuando no me vea por el castillo-.
_ Por cierto Alia, ¿qué poder tienes? - Pregunte mirando los árboles-.
_¿Quieres averiguarlo? - Dijo mientras extendía su mano hacia mi con una mirada pícara en su rostro, algo que no me convendría hacer-.
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La Tirana °Editando°
VampirElla era una cruel princesa de aristocracia, hermosa pero de un frío y cruel corazón Quién podría siquiera haber pensado que por el error de un vampiro ella terminaría siendo convertida. Terminará siendo una eterna Tirana. © Esta novela tiene der...