Era su aroma y no había duda en ello.
—¡Kaname-sama, lo sentimos! —oí exclamar a Ruka—. ¡Tratamos entrar por la puerta pero no podíamos, las raíces que usted ha destruido no permitían nuestro paso, Kain no pudo usar su fuego contra ellas!
Ruka hablaba rápido, tan rápido como nunca antes visto. Parecía realmente nerviosa.
—Además —continuó, pero esta vez murmurando—, la sangre de Lena-san... Temíamos entrar y no controlarnos. Por eso fuimos hacia su ventana, pero había Niveles E queriendo entrar por ella. Los estábamos destruyendo pero una sangre pura llegó y los destruyó a todos Luego entró por la ventana y...
—Les agradezco, Kain, Ruka —dijo Kaname—. Esperen aquí.
Oí una puerta abrirse.
Kaname entró y luego cerró la puerta mientras aún me cargaba. El aroma de la habitación era agradable pero extraño. Todo olía a Kaname, excepto por un aroma diferente, el aroma de alguien más.
Kaname me acostó en una cama y abrí los ojos para encontrarme con ese color borgoña, con ese exquisito aroma. Mi corazón se aceleró al verlo. Instantáneamente, sentí mi garganta en llamas. Tomé a Kaname del cuello de la camisa y lo acerqué fuertemente a mi. Sus manos cayeron con pesadez a ambos lados de mi cabeza. Deslicé la lengua por su largo cuello y aquel aroma distinto que sentí al entrar en el dormitorio llegó a mi boca, acompañado del fascinante sabor que tenía Kaname.
Clave los colmillos en su cuello. La sangre de él no tardó en deslizarse lentamente por mi garganta, como una cascada lenta y caliente. Se sentía tan extrañamente deliciosa, produciendo una sensación de adrenalina y placer que calmaban mi sed. Oía vagamente el sonido de mi piel cicatrizando rápidamente las heridas, cerrándolas. Todo era tan... diferente.
Me aferré fuertemente a su ropa apretándola entre mis dedos y lo atraje más hacia mí, mordiendo aún mas fuerte. Kaname acercó su cuerpo al mío, demostrándome que también disfrutaba lo que estaba sucediendo entre los dos. Las imágenes de ésa noche juntos, de entrega el uno con el otro, llegaron a mi mente y despertaron dentro mío sentimientos que no sabía si podía controlar ahora mismo. Me excitaba de sólo pensar tenerlo cerca otra vez, y saborearlo de mil formas. Me pregunto cuánto placer podría alcanzar de esta forma, con su cuerpo y sangre en mi boca.
Aparté los colmillos de su garganta y deslicé la lengua por la mordida. Tenía mucha sed, pero temía hacerle daño, temía que acabase como Hikari. Me daba miedo pensar en la obsesión que podría tener por la sangre de este vampiro. ¿Sentiría por mí la misma sed que yo hacía él?
Nuestros ojos se encontraron con intensidad.
—Uhm, Lena-san, Kaname-sama —dijo una voz aguda.
Kaname se apartó y pude observar a la joven que él había cargado en sus brazos hace rato, cuando Rosemary se había apoderado de mi cuerpo. Yuuki, con ahora el cabello muy largo (bastante largo a decir verdad), nos miraba preguntándose si debía quedarse o marcharse.
La inspeccioné por completo recordando a Rosemary decirle a Kaname que la había despertado. Entonces Yuuki también era una sangre pura...
Mis mejillas se prendieron fuego al recalcular que aquella chica había visto mi apetitosa cena "Sangre de Kaname". Miré a Yuuki con las mejillas al rojo vivo hasta que me di cuenta que el aroma que esparcia Yuuki era el mismo que degusté en mi boca. Entonces... ella había bebido de Kaname también.
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Vampire Knight: Memorias de un vampiro
FanfictionLos misterios se resuelven, siempre fue así. Aunque está claro, hay algunos que muchas veces no se llegan a descifrar. Es en ese entonces cuando caen en un abismo sin fin y se pierden hasta ser olvidados. Por otro lado, la curiosidad... La curiosida...