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Tyler se despertó de golpe, completamente exasperado al oír gritos dentro del apartamento de su novio.

Se levantó rápidamente, un poco desorientado al estar en la habitación. Seguramente Josh lo había llevado hasta ella después de lo sucedido. Corrió hasta la sala sin percatarse de una cosa principal.

Estaba completamente desnudo.

Se topó con una de las escenas más horribles que pudo imaginar alguna vez. Sus ojos se cristalizaron al ver como el cuerpo de Josh se encontraba en el piso, con los ojos cerrados mientras que su hermana gritaba y trataba de reanimarlo.

Miles de malos pensamientos pasaron por la mente de Tyler en ese momento.

La chica alzó la mirada y volvió a gritar al ver el estado de Tyler. El castaño tan solo tapó sus geniales con ambas manos y corrió por un par de bóxers para cubrirse.

— ¿¡Qué ocurrió!? - exclamó el castaño, al regresar corriendo.

Se hincó frente al cuerpo de Josh y trató de buscar su pulso, por fortuna, lo encontró.

— Estábamos preparando el desayuno... - tartamudeo la chica, tratando de controlarse. — Y de pronto dejo de prestarme atención, y se desvaneció por completo.

Tyler rápidamente corrió por su teléfono y marcó al doctor de confianza de Josh.

Después de unos minutos, y de haber llevado a Josh al cuarto, el doctor se encontraba revisándolo.

Tyler seguía en sus bóxers y Ashley se encontraba mordiendo sus largas uñas, mientras sus ojos seguían cristalizados.

— Bien, ¿Dices que se perdió por un momento? - la chica asintió. — Sí, debió haber tenido baja la presión, quizá, fue provocada por la ansiedad que tiene Josh... Chico, ¿Sabes si dejó los cigarrillos?

Tyler se paralizó, y negó torpemente.

— El silbido no se ha ido, y ahora se puede escuchar con más fuerza - respondió al instante. — Debes asegurarte a toda costa de que los deje, no queremos que avance a peores situaciones.

[...]

Josh abrió los ojos de poco en poco, topándose con la figura de Tyler con los ojos cristalizados acariciando levemente su mejilla.

Los ojos de Tyler se abrieron de par en par y una sonrisa se formó en su rostro inmediatamente.

— Joshie - murmuró. — Tranquilo amor, todo está bien.

El castaño siguió acariciando la mejilla de Josh, quien lo veía sin comprender nada. No podía recordar que había sucedido, o el por qué Tyler tenía los ojos cristalizados.

Había hecho sentir mal a su pequeño, no sabía que había ocurrido y ya se sentía mal por ello.

Se sentó con dificultad, y tomó con delicadeza las manos de Tyler para besar el dorso de estas.

— ¿Qué pasó, pequeño?...

— Te desmayaste - una tercera voz apareció en la habitación, llamando la atención de ambos chicos. — Y fue la mayor angustia que jamás hemos pasado.

Josh observó a su hermana atónito. Un pequeño flash back llegó a sus ojos, pero no era muy claro.

— Joshua, no sabía que fumabas.

La boca de Josh se abrió, intentando decir algo; sin embargo, las palabras no fluían. El de cabellera carmín volteo a ver a Tyler, quien tenía la cabeza baja, mientras reprimía un par de lagrimas que estaban acumuladas en sus ojos.

Tyler se levantó y salió de la habitación rápidamente, dejando a los dos hermanos solos.

— AshleyPie, yo...

— Joshua, no sabes la angustia por la que pasamos - interrumpió. — No solo yo, hubieras visto a Tyler, casi se muere al verte ahí tirado.

Josh bajó la mirada.

Pensó por un momento en su pequeño, y el corazón se le estrujo al imaginarse aquella escena.

Era inevitable, la gente que más amaba, siempre era la más lastimada.

Y Tyler era lo que más amaba en este mundo.

— Tienes suerte de tenerlo - lo llamó su hermana. — Comienzo a pensar que en verdad no lo mereces.

— Lo sé... No tienes que recordármelo.

Only lovers left alive.  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora