—Kylie—
Seco mi rostro con una de las toallas perfumadas con olor a lavanda de Jaxon. Miro mi aspecto horrible en el espejo, estoy que doy asco totalmente, las bolsas en mis ojos son notorias, mis pómulos están pálidos y mis mejillas mas regordetas. Tomo una bocana de aire dándome por vencida, salgo del baño lentamente y a paso sumamente lento camino hasta la cama sintiendo mis piernas muy débiles y mis cuerpo como si fui abatida a palos.
Bajo la mirada burlona de Jaxon logro llegar a la cama, con igual ritmo aparto el cobertor y me acuesto retirando mis pantuflas dándole la espalda. El se ríe, intento ignorarlo pero no puedo.
- ¿puedes dejar de burlarte? - pregunto asqueada.
- si, pero no quiero - suelta una risotada - pareces una abuelita con artrosis.
Giro mi cabeza y lo miro con cara de "enserio" - ¿justo como te veras tu dentro de poco? Te recuerdo que casi cumples veintiséis.
Su sonrisa se borra sustituyéndose por una linea fina - no le veo la gracia.
Me mofo de el - pues yo si, pronto serás un viejo lleno de canas y arrugas que tendrás que usar andadores, pañales y solo podrás tener sexo con ayuda de pastillas - hago un falso punchero - que pena.
El me fulmina con la mirada - y allí estarás tu para cambiarme los pañales.
Niego sonriendo incorporándome en la cama hasta quedar sentada como el - contrataré a una de esas viejas amargadas como tu enfermera y le pagaré para que envenene tus sopas para quedarme viuda, sexy y muy muy rica.
El gruñe - pues en ese caso no pienso ponerte en mi testamento, te quedaras vieja, amargada y muy muy pobre.
Lo miro con burla - siempre puedo buscar algún otro tío millonario para que me lleve a Brasil y vivir con el feliz en una playa mirando al cielo y diciendo... oh, gracias por eliminar la plaga Well, Dios.
El me mira con los labios y el ceño fruncido - no creo que serias capaz de eso.
Me inclino hacia el mirándolo directo a los ojos - nunca dudes de mi, Well.
El pasa su mirada de mis ojos a mis labios y por unos segundo, al ver sus ojos oscurecerse, recuerdo lo que pasó esta mañana, mierda, ya van dos veces que el deseo me consume y casi casi me entrego a el en dos ocasiones, ocasiones que han sido interrumpido sus padres.
El deja los papeles que estaba firmando sobre la mesa con su brazo derecho sin dejar de mirarme. El aparta el pelo de mi rostro tomándolo todo detrás de mi nuca y tira de mi en su dirección haciendo que nuestros labios se Rosen pero sin llegar a besarnos mandando choques eléctricos a todo mi cuerpo.
Y justo en ese puto momento alguien llama a su celular. Maldigo en voz baja alejándome de el mientras que el gruñe un "maldición".
Definitivamente el mundo está empeñado en cortarnos el rollo.
- Well - contesta con tono borde, su ceño se frunce y una sonrisa tira de sus labios - buenas noches a ti también, Jeanet... - en cuanto menciona su nombre todo rastro de deseo se esfuma en mi y es reemplazado por rabia descomunal - no, no estoy ocupado.
Mis manos se vuelven puños mientras lo veo sonreír ante algo que ella le responde, de tanto enojo siento que pierdo fuerzas por unos instantes haciendo que caiga de costado contra la cama mi vista se nubla por unos segundos obligándome a cerrar los ojos y aferrarme a las sabanas, respiro profundo un par de veces recuperándome, miro a Jaxon y el está hablando y riendo.
¿ven por que digo que ella siempre se interpone entre ambos?
Enojada me siento de nuevo y arrebato el iPhone de sus manos - ¡¿que diablos te pasa?!
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CASADA CON EL ENEMIGO *{EDITANDO}*
Romance- dime que esto es una broma - murmura el con total fustracion en su voz - ¡de tantas mujeres que existen ¿por que tenia que ser Lorens?! - grita dramaticamente. Gruño mirandolo con fastidio - creeme que a mi no me hace muy feliz la idea de hacer...