- dime que esto es una broma - murmura el con total fustracion en su voz - ¡de tantas mujeres que existen ¿por que tenia que ser Lorens?! - grita dramaticamente.
Gruño mirandolo con fastidio - creeme que a mi no me hace muy feliz la idea de hacer...
- bruja... - escucho el susurro lejano que me hace abrir pesadamente los ojos encontrandome a una muy emocionada mami mirandome inclinada hacia mi.
- ¿que quieres? - pregunto bostezando.
- te tengo buenas noticias - y antes de que pueda decir algo mas, ella me muestra dos papeles que me lleva tiempo en reconocer.
- no estés jodiendo - me incorporo rápidamente en la cama para sostener el papel en mis manos mirándolo bien.
Miro a mamá quien está muy emocionada mientras asiente y juro que tiene ganas de chillar como adolescente. Sonrío yo también poniéndome de pie para abrazarla.
La emoción que siento dentro de mi es inexplicable, no por salir, porque siendo realistas no tengo a donde ir en este instante, pero si porque por fin podré volver a ver a mis hijos y eso me emociona como tenia años que no me sentía.
- ¿como los conseguiste? - pregunto mirando el acta de libertad con mi nombre en mis manos.
- me los entregó Helga hace poco, dice que no esta muy feliz por perder a sus mejores vendedoras pero que tenemos media hora para largarnos o de lo contrario cerrará las puertas para impedirlo - dice emocionada mientras busca la ropa que compré cuando venia de camino de Seatle de mi juicio hace seis meses.
Veran, luego de salir del juzgado, le pedí a Becca que por favor detuviera el autobús en una tienda de ropa femenina y ella accedió, dejamos a Kendall y a Heder a cargo de las demas guardianas y ambas entramos a la tienda, con todo y esposas y uniforme de reclusa compré una muda de ropa para mi y otra para mamá para que estuviéramos listas, aunque claro, no tenia ni idea de que saldríamos juntas aunque quería hacer ese detalle por ella ya que se lo merecía y no tenia nada que ponerse para salir de aquí luego de diez año. Fue divertido ver las expresiones de terror de las demás compradoras al verme con esas fachas siendo escoltada por una carcelera y con mis manos esposadas.
Doblo el papel asegurándome de no perderlo y tomo la ropa que me tiende que no es mas que una camiseta holgada en estilo vintage en frente que tiene escote, unos leggins negros ceñidos, botas timberlake marrones y gafas de sol. Para madre escogí unos short jeans, camiseta de tirantes blanca y unos cómodos zapatos bajos.
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- ¡nos vamos de este maldito lugar! - chilla emocionada desvistiéndose para luego ponerse la ropa con velocidad al igual que yo.
—Jaxon—
- ¿Jaxon? ¿a donde vas a estas horas? - pregunta mamá bostezando.
- tengo que recogerla, mamá - digo nervioso colocandome el reloj.
- ¿y tiene que ser a las doce de la media noche? - protesta.
- mamá, son quince horas de trayecto y no tengo exactitud de a que hora va a salir y quiero estar allí para recibirla, si no lo hago no tendré manera de encontrarla después y traerla ¿entiendes? - la miro suplicante.
