Capítulo Nº 4

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   Por el agujerito de la puerta, se podía ver a una chica joven, delgada, sonriente y con mechas californianas hasta las caderas. Y lo más importante, llevaba algo recién horneado entre manos... Que olía de maravilla...

   —Soy Nathalie Parks, ¡Vuestra nueva vecina! He visto el camión de mudanzas hace un rato y... Bueno, ¡Pues he decidido preparar un bizcochito de chocolate pars mis nuevos vecinos! —dijo risueña la chica, aún desde el otro lado de la puerta.

   Parecía muy maja, y llevaba repostería de chocolate... Que demonios, le dejé pasar.

Iba vestida con unos shorts deportivos, una camisetita de tirantes rosa chicle y unas Vans rosas también.

   —OH DIOS MÍO, ¡AMO TU BIKINI! —me dijo mirándome de arriba a abajo.

   —Eh... ¿Gracias...? —balbuceé— Me llamo Noah, Noah Stevenson, acabo de mudarme desde Irlanda.

   —Oh, pues yo vivo dos casas más allá —dijo señalando una villa blanca— es esa de allí. Podríamos ser amigas, ¿No crees? Si quereis os puedo ayudar con la mudanza...

   —¿Quién es, Noah? —preguntó mi madre asomándose por la escalera.

   —¡Una nueva vecina, mamá! ¿Podemos subir a mi habitación?

   —Calro cielo, ¡Pero tened cuidado con las cajas!

   —¡Vale mamá! —terminé.— Bueno, ¿Subimos?

   —¡Claro! —sonrió ella.

   Nathalie parecía buena chica, yo creo que en seguida íbamos a congeniar y a llevarnos bien.

   Subimos a mi cuarto y Nathalie se quedó flipando en colores, mirando y tocándolo todo cuanto había por mi habitación, aún con el bizcocho ena la mano.

   —Pero pero pero pero pero... ¿ESTE CUARTO? OMG.

   —Sí, ¡Yo he dicho básicamente lo mismo cuando he llegado!

   —Esque es alucinante... ¿Eres rica o algo? JAJAJAJA *-*

   —JAJAJAJA para nada, ¡Es cosa de mi padre!

   —¡Pues felicítale por ello...! —dijo aún con los ojos clavados en mi cuarto.

   Nos sentamos en mi cama a hablar, y me empezó a contar su vida y yo a ella la mía. Me contó que ella también es Belieber, que tiene un labrador pequeñito llamado Desse. También me contó que tenía un hermanito de la edad de Evan, llamado Derek, al que básicamente le gustaban las mismas cosas que a Evan. Me contó que iba al Western London High School, o WLHS, para abreviar. Como yo aún no tenía matrícula hecha en ningún colegio, decidí plantearle a mi padre la posibilidad de ir al WLHS con mi nueva amiga Nathalie.

También me contó que no tenía muchos amigos por culpa de una tal "Crystal Brown." ¿Crystal? ¿Qué clase de padres crueles le ponen a su hija el mismo nombre que al material de las ventanas? ¿¡QUÉ CLASE DE PADRES!? 

Me contó que el mayor hobbie de la tal Crystal era fastidiar y meterse con la gente menos popular. 

   —Pues que guarrilla —respondí yo tan pancha.

   —¡Ya ves! Y eso no es todo, lo malo es que sunpadre es el directior del colegio, y como alguien le toque un pelo... ¡Se la carga! —contestó ella.

   —Pues que asco de tía, ¿No? —dije.

   En vez de quedarnos en la habitación, Nat (que es como empecé a llamar yo a Nathaile, y ella a mí "Noe," por alguna razón) se ofreció a enseñarme la urbanización de arriba abajo. Cogí un vestido-pantalón de flores de una de las cajas junto a unas sandalias blancas y mis gafas de sol preferidas; y sin avisar ni nada, salimos por la puerta. Dejando el bizcocho allí, en medio de la moqueta roja de mi habitación.

   Íbamos caminando por la acera de una ancha avenida de palmeras altísimas, mientras nos íbamos contando nuestra vida la una a la otra. Descubrí que en la urbanización había un pequeño supermercado, varias cafeterías pequeñas y una piscina exclusiva para vecinos, con su bar-chiringuito, su jardín y sus tíos buenos al lado.

Entramos en el bar y de una máquina expendedora, Nat me invitó a un Nestea fresquito, mientras seguíamos contándonoslo todo y haciéndonos cada vez más amigas.

En una de ésas, me puse a mirar a la piscina por la cristalera del bar, y había una chica como de mi edad en una tumbona con un libro y unas gafas de sol, mirando "disimuladamente" como jugaban a volley unos chicos.

   —Oye Nat, ¿Quién es la chica del libro? —pregunté curiosamente. 

   —Ah, ¿Esa? Creo que se llama Lea, Lea Hoffman o algo así...

   —¿La conoces? —pregunté girándome hacia ella.

   —Tsé, más o menos, es la obsesa de los tíos buenos, viene a mi clase de biología, pero nunca hemos hablado... Se pasa las clases mirando a Mark Smith, el novio de Crystal la guarilla. Bueno, "NOVIO" es mucho decir. ¡La Crystal se ha tirado ya a medio instituto! Y yo aún sin dar mi primer beso... ¡AH!

   —¡Bienvenida al club! —me sobresalté— a mí tampoco me han besado nunca... Bueno, al tema, ¿Que decías de la tal Lea? —dije señalándola.

   —¡Ah sí! A ver, Lea. Nunca he hablado con ella, creo que también vive por esta urbanización... Viene aquí todos los sábados por la tarde con su libro y sus gafotas de sol a mirar a los tíos.

   —¿Y si nos acercamos a decirle algo? —propuse yo— ¿Quién sabe? ¡Puede ser divertido!  A lo mejor es majísima...

   Nathalie se quedó pensativa mirando a su bebida unos instantes, y después reaccionó.

   —Bueno, ¡Vale! Tienes razón, ¿Por qué no?

Just Hug Me ♥ (One Direction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora