No.- solté una pequeña risita y arrugue la nariz.- Basta.- volví a reír pero una risa desconocida hizo que mi risa se detuviera, así que solté un puñetazo aún con los ojos cerrados y luego se escuchó algo caer fuertemente.
-Auch.- ahora un quejido masculino.
¿Qué rayos?
-Tienes tres antes de que te saque a patadas de mi recámara, intruso.- me senté en mi cama aún con los ojos cerrados y él volvió a reír.
-¿Así tratas a un amigo por las mañanas?
No sé si era que aún estaba algo adormilada y más tonta que no entendía nada o era mi retraso mental.
No Caytlin, tranquila, es tu resaca por tomar tanto ayer.
¿Ayer? ¿resaca? Ay Dios, es cierto, ayer yo....
Y de repente una ráfaga de pequeños flashes aparecieron en mi cabeza, con imágenes de lo que había pasado ayer.
-¿Sabes? me gustas más ebria, así eres un poco más.... No, olvídalo, ayer fuiste más que brusca... aunque por fin confesaste que tienes buenos gustos.
Me quiero dar un tiro.
Claro, cómo pude ser tan idiota, ayer no había hecho más que cometer estupideces, empezando por el beso con Dilan, seguido de la pelea con Alexa, terminando con Jayden y yo gritándole y diciéndole que me...
Dios, lo que hace el alcohol, ni siquiera eres consiente de lo que haces, tan tonta como siempre.
No recuerdo que tú me hayas ayudado en mucho consciencia ¿dónde mierda están los pensamientos coherentes cuando los necesito? Es para lo que te tengo, pero no, cuando necesito reaccionar estás de vacaciones, ah pero cuando no necesito nada estás ahí, haciendo que piense cosas estúpidas.
-Al parecer el alcohol sigue en tu cuerpo, estás más lenta que de costumbre.- Jayden estaba en el suelo jugando con una pluma blanca y sonriendo como el gato de Alicia en el país de las maravillas.
-Idiota.- achique mis ojos e hice un puchero volviendo a recostarme.-Agg ¡Mi cabeza me duele!
-Ten.- abrí mi ojo izquierdo y posé mi mano en el ojo derecho cubriéndome del sol que entraba por la ventana de mi habitación.
-¿Vas a drogarme?- Jayden tenía un vaso con agua en su mano derecha y en la mano izquierda tenía unas pastillas, supongo que eran para mi resaca.
-Que mal agradecida, ten.- volví a sentarme y me tomé la aspirina después di un gran trago al vaso de agua y se lo devolví a Jayden.
-Gracias.- murmuré y luego lo miré, claro él me sostuvo la mirada así que le quite el vaso de las manos y volví a tomar de el esquivando su mirada que buscaba la mía.
-Así que te gusto.- dijo el con chulería y yo comencé a toser como loca y el agua no salió de mi boca, el agua salió por mi nariz así que le devolví el vaso y el se acercó a mi sentándose a mi lado. ¡A mi lado! ¡A MI MALDITO LADO! Como si tenerlo cerca no fuera ya muy incómodo.
- Hey ¿estás bien?
-¿De qué hablas?
Ay estúpida, no indagues más, él preguntó si estás bien ¿era mucho pedir que tú le dijeras un simple bien?
Esto lo íbamos a hablar tarde o temprano.
-¿De qué hablo?- cuestionó él, aunque sabía que él ya sabía de que hablaba.
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Antes de morir
RandomEs increíble como la vida te da tantas razones para vivir, para llorar, para reír, para querer morir. Esa ultima no era una opción agradable, muchos dicen que son desdichados, que quisieran morir, yo los llamo cobardes ¿Quién querría morir? por lo m...