La suerte nunca está de nuestro lado

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  Hola, antes de que lean el capítulo y, para que no haya confusiones, he cambiado el nombre del hermano de Camil  a Aiden.

***

-¿Hum?- abrí mi ojo izquierdo y vi a Jayden acostado a mi derecha sobre la cama de Camil, sonreí y lo abracé acercando mi cuerpo al suyo y acurrucándome en él como si de un oso de peluche se tratara.

 -Buenos días, Cay.

-Buenos días Jayden.

 Espera ¿Jayden? ¿qué mierda hace Jayden en casa de Camil? 

 Abrí rápidamente mis ojos y me senté con velocidad en la cama provocando que me mareara y mi vista se tornara borrosa. 

 -Dios...- tomé mi cabeza con mi mano izquierda. 

-Sé que provoco cosas en ti que hacen que tu salud... 

-¿Qué mierda haces aquí?- interrumpí, histérica, sin comprender nada. 

-Verás... 

-¡Aiden eres un estúpido!

 ¿Camil? Okay ¿qué rayos pasa aquí?

 -Esa es mi señal. 

-¿Tu se...? ¡¿qué mierda haces, Jayden?! ¡Bájame, mierda!- Jayden me estaba cargando como una bolsa de patatas. 

No Caytlin, lo de la bolsa de patatas ya está muy usado, mejor como una bolsa de... mangos, sí, mangos está perfecto.

 Como una bolsa de mangos, y luego dio una nalgada a mi trasero caminando a la salida. -Tienes un lindo trasero, Cay.

-Idiota no me llames Cay. 

-¡Oye! ¡baja a mi estúpida amiga, ahora!

 ¿Estúpida qué? Camil, estúpida. 

-Corre por tu vida hermano.- Aiden dio unas palmadas al hombro derecho de Jayden y éste salió corriendo conmigo sobre su hombro derecho provocando que yo brincara sobre él, y dejándome ver a Camil atada a una silla aún vestida de abejita y Aiden con una sonrisa burlona. 

-Ese vestido te queda muy bien.

 -¿Qué...? oh, gracias, Camil quería que yo me vistiera como gatubela pero no tenía un disfraz así, por lo que me hizo usar este vestido.

 -Resalta tu culo.

 -Imbécil.- dicho esto, Jayden sólo rió y caminó, conmigo aún en brazos, hasta el auto de su madre.

¡¿De su madre?! ¡¿de Marta?! 

(...) 

-¿Entonces tu madre te dio su auto mientras arreglan el suyo?- termine de bajar mi blusa de mangas color gris y abrí la puerta de mi habitación. 

-Sí.- contestó él mordiendo su manzana.

 -Bueno...- caminé hasta la sala y tomé mis llaves.- Andando, iremos a comprar pintura.-¿Para qué?-Cosa número tres de mi lista, andando.- camine hasta la puerta y luego gire a ver a Jayden.- ¿Por qué no avanzas?

 -¿Por qué no tienes el vestido de Camil? te veías mejor.

 -No saldré así, además esto es más cómodo.- levante mis manos y observé mi cuerpo, llevaba unos vaqueros negros, mi ya mencionada blusa de mangas gris, con unas pequeñas botas cafés y una bufanda beige. 

-Bien...- Jayden suspiró y tomó las llaves del auto de su madre. 

(...)

 -¿Enserio vas a hacer esto? 

Antes de morirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora