Héroe cautivador.
Marissa salió del cuarto y camino a la enfermería, pensaba que tal vez Verónica estaría con él pero eso no importaba, le salvo la vida lo mínimo que podía hacer era asegurarse.
Por suerte recordó como llegar a la enfermería, abrió muy lentamente la puerta esperando lo peor, ya casi podía escuchar los gritos de Verónica destrozándole los oídos, pero para su sorpresa no estaba, lo único que permanecía en el lugar era Anthony sobre la cama con el abdomen vendado, Marissa se acercó a él, y noto la perfecta forma de su pecho, tan liso y suave, luego miro su rostro, tenía el cabello mojado en sudor, los parpados cerrados y sus boca se hallaba entreabierta, sus suaves labios estaban estáticos, sus perfectos dientes se asomaban ligeramente, era simplemente hermoso.
La chica lo observo por un instante, lo suficiente para notar que su respiración era irregular y parecía inquieto, como si tuviera una pesadilla, no lo había notado antes ya que lo estaba admirando, se sentó junto a él y le tomo la mano.
El contacto hizo a Marissa estremecerse, Anthony estaba caliente, era posible que tuviera algo de fiebre, levanto la vista y se topó con esos bellísimos ojos azules mirándola fijamente. Anthony dormido era como un delicado ángel, ahora, con sus ojos abiertos era como una explosión de magia.
—Aquí estas— dijo Anthony casi sin aliento, estiro una mano y le acaricio la mejilla, el contacto la hizo temblar, Anthony la tocaba con tanto cuidado que parecía que se rompería en cualquier momento.
—Anthony ¿cómo te sientes?—los ojos de Anthony eran todo un espectáculo, de un colo tan azul que era irreal.
—Acabo de soñar que no podía salvarte, tenía tanto miedo— dijo suspirando, al sentir su aliento en la cara, Marissa se dio cuenta de que estaban demasiado cerca.
—Aquí estas, puedo ver que estas a salvo, parecía todo era una ilusión, me alegra ver que la parte en la que salías viva es nuestra realidad— susurro el chico y la miro a los ojos, Marissa se perdió en su mirada llena de ternura.
—Me salvaste y te lo agradezco, sin embargo, te hirieron por mi culpa, lo siento— Anthony la tomo de la barbilla y le levanto el rostro hasta que su nariz y la ella se tocaron, ahora si estaban demasiado cerca, Marissa no podía más que pensar en besarlo ¿que le ocurría cuando estaba cerca de Anthony? se sentía a salvo y como si toda su atención se centrara en él. Era como si ella fuera un satélite y Anthony fuera su planeta.
Jamás había sentido algo igual.
—Lo haría una y otra vez si es necesario— se acercó a ella, pudo sentir el aliento de la chica en su boca y eso lo volvía loco, quería besarla solo eso, besarla sin que nada más importara, acerco sus labios pero en ese momento la imagen de Cameron le nublo la mirada y se alejó de Marissa dejándola totalmente desconcertada.
Había estado demasiado cerca.
—Prometí que te cuidaría— dijo el chico que se sonrojaba notablemente al igual que Marissa, las cosas habían llegado a un inesperado punto.
—Muchas gracias, sin ti, seguramente ya no estaría aquí— esas palabras hicieron que el corazón de Anthony diera un salto de alegría.
Anthony le tomo la mano con cariño y le dedico una de las sonrisas más encantadoras que había visto Marissa, Anthony era sumamente guapo y encantador, la sonrisa en su cara solo lo hacía peor...se volvía arrebatador.
—Ahora que lo pienso bien, tú también me salvaste, eres muy valiente— Anthony trato de incorporarse, pero el dolor del abdomen se intensifico deteniendo sus movimientos en seco.
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Recuerdos Ocultos |En Edición|
Paranormal"Condenada a olvidar, atemorizada por un pasado desconocido, castigada por su pecado, su pasado la encierra, los recuerdos la atormentan, no existe salida para aquello que ya esta escrito. Sus alas fueron arrancadas y su naturaleza borrada, condenad...