Eres Mia(OP#2) ✔️

cap. 30

Un mes después.

Corrí unas vueltas más antes de volver por el mismo camino que llevaba a mi casa. Sentí como la rodilla me estaba pasando factura por lo que me quedé a tomar aire frente a un árbol. Desde que tuve el accidente hacer ejercicios ya no era igual, mi rodilla apenas al primer esfuerzo ya se hacía sentir. Era un fastidio.

Suspiré y comencé a caminar lentamente el resto del camino.

Podía sentir como alguien me observaba, era ilógico aunque las veces que la sentía siempre estaba en lo correcto. Y ésta sensación lo había sentido hace tres años atrás cuando lo conocí. No me atrevo a decir ni pensar en su nombre, porque no quería siquiera recordarlo. Desde que me ha dejado en el vestidor sin razón alguna, no lo había visto jamás. Sé por mis amigos que aún vive a lado de mi casa, pero no lo veía por más de que me quedaba horas esperando que llegase pero nunca lo hacía. Era como si saliera antes de que despierte y llegara luego de que ya me había dormido.

Quería decir que era un alivio, no verlo significa olvidarlo más rápido de lo que podía desear. De vez en cuando salía de fiesta con mis amigos y cada vez, la esperanza de verlo aumentaba. Era un calvario. Pero estaba segura de algo, desde aquella vez, solo me dediqué a odiarle, lo odiaba con cada fibra de mi ser. Escuchar su nombre hacía detonar la bomba en mi interior y no hacía más que descargar mi ira contra el saco de boxeo.

Dylan, fue mi soporte en todo éste tiempo. Harry, el cual volvió a Nueva York, me llamaba todos los días al saber de mi situación. Agradecí que después de todo lo que le había hecho aún estaba ahí para mi.

Luke, prácticamente, se había mudado conmigo ya que no se ha vuelto ir de mi lado y se lo agradecía en verdad.

Observé sobre mis hombros controlando que mis sospechas solo sean eso, sospechas. Y al parecer sólo eran eso o una paranoia mía porque no había nadie alrededor.

Cuando volví el rostro choqué contra alguien. Haciendo que ésta cayese.

--- ¡Oh! Lo siento mucho... --- Le extendí las manos a la chica.

Cuando ésta levantó el rostro me quedé perpleja al ver de quien se trataba. Ella también estaba en las mismas que yo.

--- ¿Kate?--- Pregunto con asombro.

--- ¿Zoe? --- Dice ella en respuesta.

Acepta la mano que le extendía y la ayudo a levantarse. Cuando lo hace, me rodea con sus brazos. Me sorprendí ante su acto pero también rodee su cuerpo. Ésto era extraño.

--- ¡No puedo creer que te haya encontrado aquí! --- Exclama con entusiasmo.

--- Si, yo tampoco puedo creer que estés aquí.  --- Digo con falso tono amistoso.

Ella sonríe mostrando sus dientes. --- Estoy aquí hace un mes y dos semanas Zoe. Creí que Seth te lo dijo. --- Dice.

No hacía falta mencionar que solo lo dijo para molestarme pero aun así sonreí con suficiencia.

--- Oh, lo siento, ya no hablo con Seth. --- Le digo.

Su rostro se torna a una triste, sabía que era más falsa que mis uñas postizas.

--- ¡Oh, lo siento! No tenía idea.. --- Dice y envuelve sus brazos alrededor de mi. --- ¿Fue por lo que pasó en la cabaña? Porque si es así lo lamento mucho, no era mi intención que ésto vaya lejos.

Le sonrió.

--- No, las cosas no iban bien entre nosotros. --- Murmuro. --- En fin, un gusto volver a verte. Nos vemos.