Mi Gran Amor -Ross Lynch & Tú

Capítulo 24

Narra _____:

Ya habían acabado las primeras horas de clase, después de oír todas esas cosas empecé a pensar en qué cosas me esconde Ross.

Salí de mi salón y empecé a caminar hacia la cafetería. Se supone que hoy llegaría Dylan o bueno, eso dijo el director.

Llegué y fui a pedir mi almuerzo. Sinceramente hoy quería estar sola, no quería estar con Ross o con cualquiera de los chicos.
Amo de verdad estar con ellos, pero tengo demasiadas cosas en mi cabeza que no permitirían que les tomara atención, además necesito un respiro de todo, de los problemas como el que tengo con mi padre y los nuevos problemas, que es lo de Ross.

Me dieron mi almuerzo (que consistía en un Sándwich y un jugo de manzana) y caminé hacia una mesa que estaba desocupada. Me senté ahí y me empecé a comer mi Sándwich.
Por fin, paz y tranquilidad.

Por cierto, tengo que hablar seriamente con Ross. La verdad es que, no sé por qué no me contó todo esto, hablo de que jamás me comentó que pasaba algo así en la universidad y también no sé por qué no me ha dicho que clase de chico popular es.
Espero que no sea la clase de chico idiota que menosprecia a los demás.

Tal vez sea idiota lo que esté pensando, pero necesitaba respuestas.

Justo estaba ya por irme, cuando Ross llegó y se sentó al frente mío.

-Hola pequeña- sonrió, gesto que yo no le pude devolver bien.

-Hola Ross- agarré lo que quedaba de mi jugo de manzana y me lo empecé a tomar.

-¿Por qué estás tan sola? Te dije que nos veríamos a esta hora para presentarte a mis amigos- me miró preocupado- ¿te pasa algo?- preguntó y yo negué con la cabeza.

-No, solo es que... aún estoy nerviosa. Todavía falta conocer a otros profesores y todo eso- reí nerviosa.

-¿Segura?- asentí y al momento tocaron el timbre, lo cual agradecí internamente.

-Nos vemos, Ross- me levanté de mi lugar y traté de irme lo más rápido de ahí, pero obviamente él me alcanzó.

-¿Qué pasa _____?- me miró frunciendo el ceño.

-Nada de verdad, me tengo que ir sino llegaré tarde- lo miré por última vez y me fui hacia mi salón.

Narra Ross:

Sé que algo no está bien con ella, la conozco perfectamente.

Ni siquiera se despidió de mí con un beso.

Estoy realmente confundido.

La pregunta es... ¿Qué hice?

Necesito hablar con ella.

Empecé a caminar hacia mi salón.

Hablaría con ella.

Entré y me senté en mi lugar, al lado de mi amigo Derek.

-¿Qué pasa?- preguntó frunciendo el ceño.

Suspiré- Realmente no lo sé-

-Tiene que ver con tu chica, ¿cierto?- dijo y asentí.

-Sí, desde que llegamos hoy se ha comportado bastante extraña conmigo y sinceramente no lo sé- volví a suspirar y miré a Derek.