19

30.3K 3.4K 787
                                    


Antes de iniciar el capítulo tengan en mente esto.

Los nombres de Romero y Juliana se ven, a golpe de vista, muy parecidos a Romeo y Julian xD.


Romeo y Julian se separaron de golpe, como si el contacto los hubiese quemado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Romeo y Julian se separaron de golpe, como si el contacto los hubiese quemado. Frente a ellos estaba la razón por la que habían comenzado el viaje. Cuando se subieron a la camioneta unos días atrás, ninguno de los dos esperaba encontrarse en una situación en la que fuesen ellos quienes hubiesen sido "atrapados".

Juliana, calmada como siempre, se apresuró a quitarse las manos de Romero del rostro. Romeo abrió los ojos sorprendido ante la vista, el rostro de la muchacha siempre causaba un impacto fuerte en las personas, era como ser golpeado con un yunque en la cabeza, como dormirse de la realidad y despertar en un sueño.

Sus ojos eran verdes, brillantes y llenos de vida, estaban rodeados de unas pestañas tupidas, de color café rojizo acompañadas por rasgos delicados, nariz respingona y labios rojos. Ella no estaba maquillada, por lo que se le notaban las ojeras y el cansancio del viaje, no parecía que se hubiese preocupado por arreglarse en el tiempo que llevaba dentro del auto, pero su apariencia seguía siendo ligeramente sobrenatural. Era preciosa, en verdad hermosa, no era sensual ni linda, lo que tenía era una belleza que calaba hondo en el alma y también era una perfecta versión femenina de Julian.

Romeo se preguntó si la razón por la que le parecía tan devastadora era por su parecido con su hermano o simple genética. Quizás era un poco de las dos cosas.

—¿Que están haciendo aquí? —preguntó ella, mirándolos con desconfianza y obviando el hecho de que los encontró en una situación muy comprometedora. Estaba en su naturaleza evitarle cualquier situación incómoda a su hermano, aunque en ocasiones, luchara contra esa naturaleza y lo avergonzara hasta la muerte.

—Juliana... —Julian la miró quedándose de repente sin palabras ¿Que iba a decirle? ¿Que venía a impedir su boda? ¡Con que valor iba a hacer eso! Su gemela lo había encontrado besándose con quien no debía. De repente todo el discurso que había preparado para su reencuentro parecía inválido.

La chica los miró frunciendo el ceño, luego se giró hacia Romeo y suspiró.

—No me digan que vienen a detenernos —preguntó cansada y un poco decepcionada. Sus ojos estaban clavados en su hermano, esperando desde el fondo de su corazón, que las cosas no fueran así. Sin embargo, estaba segura de que ellos les siguieron en cuanto no los hallaron en casa, de otra manera, no habrían llegado tan rápido ¿Con que propósito actuaron de ese modo? Ella prefería no guardar demasiadas esperanzas al respecto.

Julian, por su parte, estaba recargado contra la pared, con la ropa desacomodada y el pelo revuelto. El pobre se había quedado tan mudo que, aunque intentase gritar, nada iba a salir de su garganta. Romeo tenía el cerebro frito, pero funcionaba más que su compañero así que se giró a verlos.

Romeo y Julian (LCDVR #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora