Capítulo 5

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Pov Katniss

No aleje mi mirada de la ventana en todo el tiempo, estaba algo nerviosa por pasar la tarde en casa de Peeta, no quería avergonzarme frente a él y su familia o peor aun que supiera mi secreto, aunque podía suponer que más de la mitad de los maestros sabían cual era mi condición, pero sabían disimularlo muy bien o simplemente me ignoraban. Mis padres habían estipulado eso muy claro, tenían que mantener la boca callada o adiós a la cuantiosa suma que "donarian" para que no quitaran el programa de arte en la escuela, lo sé, era muy sucio, sin embargo para mi era la oportunidad de estudiar fuera de casa.

No es como si yo saliese mucho, sino fuese porque Finnick prácticamente les rogo a mi padres diciendo que tenia la edad necesaria para relacionarme con los chicos de mi edad, yo aún estuviese tomando clases en casa... de nuevo a petición de Finnick, ya que si por mi padres fuera, estaría todo el tiempo encerrada en mi cuarto sin hacer nada o peor, ya me hubieran arrojado a una clínica para gente "especial" como yo.

No los culpaba, tenia entendido que yo era una vergüenza para mis padres, para ellos Finnick era su único hijo, aunque a éste le molestaba que me lo recordaran a cada momento.

-Bueno... Katniss- salte cuando escuche mi nombre- Lo siento, te he asustado- negué- ¿Qué tal tu día?

No sabía si responder, no quería ofenderla con mi silencio, pero no estaba muy segura si eso fuese a pasar si abría la boca, el doctor me había dicho que lo tenia que controlar, ¿Qué debo hacer? ¿Contesto o no contesto? ¿Tengo que bajarme la bufanda o le contesto así?

-Annie, sabes que Katniss no habla mucho, no la hostigues con tus preguntas.- mire a Peeta y me sentí un poco mal por la forma en que le contesto a Annie, cuando ella solo quería ser amable con alguien como yo. Quería decirle algo, pero ya estaba deteniendo el coche, ya habíamos llegado a su casa.

-¡Discúlpame por intentar ser amable!- tomo sus cosas y salió del auto dando un portazo que me hizo encogerme.

-Discúlpala, esta algo sensible.- abrió la puerta y salió, tome mis cosas para seguirlo cuando mi puerta se abrió.- Vamos, no querrás quedarte aquí ¿verdad?

Negué y salí del coche.

La casa de Peeta era de dos pisos con pintura blanca y azul en la fachada, a simple vista se veía que lo Mellark tenían dinero, pues su jardín estaba muy bien arreglado con varios tipos de plantas y flores que en mi vida había visto, pasamos por un camino empedrado que se dirigía hacia la puerta principal. Peeta no me dijo nada en todo el camino y le agradecí por ello, entre menos hablara mejor para mi, menos aire necesitaría expulsar.

Abrió la puerta de su casa con su llave, se hizo a un lado para dejarme pasar, adentro estaba un poco más cálido, me entretuve un poco viendo la decoración rustica pero a la vez moderna, las paredes se encontraban adornadas con muchos cuadros con diferentes pinturas. Eche un vistazo y me llamo la atención que había muchos diplomas y títulos que casi cubrían toda la pared, me acerque para observar la mayoría pertenecía a "Plutarch Mellark Heavensbee " y "Cressida Anne Donner", y unos pocos a "Anne Mellark" la mayoría eran de primaria y secundaria de buena aprovechamiento, pero lo que más se me hizo raro que no había ninguno de Peeta.

-No soy muy inteligente, supongo que te has dado cuenta.- mire a Peeta que observaba los diplomas como yo- Eso de los primero lugares se los dejamos a Annie, a mi me gusta tener el segundo lugar en la familia.

Iba a decirle que estaba equivocado, que no siempre era bueno ser el segundo lugar en la vida de tu familia cuando alguien le hablo.

-¿Peeta?- una voz femenina lo llamo- Cariño ¿eres tu?- de una habitación salió una mujer como de unas treinta y muchos o cuarenta y pocos, vistiendo unos pantalones de licra y camiseta que le llegaba al muslo, de cabellera clara, usaba lentes lo que le hacían ver muy inteligente.
-Vi entrar a Annie y pensé... ¡oh!- se detuvo al verme
- ¡Hola!- me saludo con una sonrisa
- No sabría que tendríamos visitas -.

La Chica De La Bufanda Roja (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora