31 days | a yoonmin fanfiction

30

1 de octubre.

POV Jimin.

—No puedo aceptar esto.

La noche anterior fue estresante, era una de esas en donde tienes un dilema interno contigo mismo sobre qué harías el día siguiente, o qué responsabilidades tienes pendientes, o esto, o aquello. En este caso, la mía era entre regresar al teatro o dormir plácidamente hasta tarde. Pero presentía que un sentimiento de culpa inundaría mi mente si no iba, por lo que a la mañana siguiente decidí regresar al teatro y obsequiarle mi almuerzo. Me veía a mí mismo con unos kilos de más, así que darle el almuerzo no afectaría mucho mi dieta.

Al dárselo, me estrechó con fuerza entre sus brazos y, al finalizar el abrazo, no miró mis ojos, más bien sentí que los observaba con detenimiento y los estudiaba. Unos segundos después me dio su último "gracias" e hizo una reverencia.

Más tarde decidimos sentamos en el borde del escenario para compartir el almuerzo, era algo alto, nuestros pies no alcanzaban a tocar el suelo.

—Bien, y ¿cuál es tu nombre?— pregunté intentando romper con el incómodo silencio.

—Mi nombre es Yoongi.— respondió a la vez que llevaba un pedazo de comida a su boca— Muchísimas gracias, está delicioso.

—Deja de agradecerme. —dije con un tono de simpatía. Él continuó comiendo mi almuerzo, de vez en cuando me ofrecía un poco, pero yo lo negaba. —Estoy a dieta.

—Ah, vale.

Comencé a jugar con mis manos, pensando en algún tema de conversación.

—¿No te aburres aquí?

Iba a llevarse otro pedazo a su boca pero se detuvo, dejó el plato descartable a un lado y su expresión se tornó seria.

—Sí. —Dio media vuelta y señaló hacia la parte trasera del escenario. — Lo único que me divierte es este piano, pero luego de tocarlo por tanto tiempo se vuelve aburrido. ¡Las rutinas son aburridas! —Se volvió hacia mí.— De todas formas a veces salgo a tomar un poco de aire fresco, pero no por mucho tiempo, hay mucho criminal suelto y ya han intentado atacarme varias veces. —Subió un poco sus pantalones y me enseñó las pequeñas cicatrices que recorrían parte de su pierna derecha.

—Qué malditos. Pero, de todas formas, imagino que tú también los has... provocado, ¿o no?

Su expresión pasó de ser preocupada a una casi enfurecida. La había cagado.

—Sí, la verdad amo terminar con cicatrices y mi cuerpo lleno de moretones, por eso voy provocando por ahí.

Sabía que había dicho eso con sarcasmo, por lo que me disculpé con él. "Tengo que aprender a cambiar mi perspectiva sobre estas personas" me dije a mí mismo.

Un mensaje llegó a mi celular, un número desconocido lo había enviado. En la pantalla de inicio revisé la vista previa de este.

>Jimin.

>Jimin.

>Jimin.

>Park Jimin.

>Sé que estás con Yoongi, será mejor que respondas.

—¿Pasó algo?— dijo Yoongi con un tono dudoso en su voz, él había visto el mensaje también.

Extrañado abrí el chat, seguro alguien estaba haciendo una broma. Le respondí.

¿Qué quieres?<

—¿Te llamas Jimin? —Asentí. —Bonito.

Iba a contestarle a Yoongi, hasta que de manera repentina, muchísimos mensajes  que decían lo mismo comenzaron a llegar.