31 days | a yoonmin fanfiction

14

17 de octubre

POV Yoongi

Desde aquella vez que Jimin se enfadó conmigo a causa de la repentina y violenta muerte de su mejor amigo, jamás había sentido tanto miedo y nerviosismo como para quedarme despierto toda una noche con el corazón en la garganta. El sonido de los disparos se sentía tan real en mi mente, resonaban en ella como si estuvieran en una gran casa deshabitada; quería sacarlos de mi cabeza, pero no lo lograba, se estaban volviendo fastidiosos.

Sentía que penetraban cada recuerdo que tuve con Jimin, los buenos y los malos, los que quedarían para siempre en mi memoria y los que eran mejor olvidar.  Es por este motivo que no pude conciliar el sueño, estaba atemorizado. Y este temor incrementó cuando no había ni rastro de Jimin en el teatro al día siguiente.

Después de mucho pensarlo, tomé una peligrosa decisión. Estaba casi seguro de que me arrepentiría luego, mas ahora era la única opción... O la única idea no-inteligente que se me cruzó por mi cabeza. ¿Qué era lo malo de salir buscar a Jimin?

El pensamiento de los disparos hacia que no fuera consciente del gran efecto que tendría en mi día a día, todo estaba entre la vida y la muerte, pero eso no era importante, sino el encontrarlo donde quiera que esté, y arriesgaría todo para que vuelva.

Tomé una bocanada de aire y salí del teatro aún con aquellos pensamientos en mi cabeza. Bajé con lentitud por los escalones de la escalera principal y comencé a observar todo a mi alrededor, el teatro era más inmenso de lo que creía, y todo se encontraba en el mismo sitio como cuando llegué aquí.

Caminé un poco hasta llegar a la esquina, allí pude ver a dos policías conversando, me lo temía. Era raro que Jimin llegara tan tarde al teatro, sumándole los disparos y el mal presentimiento de ayer. De solo pensar que había pasado algo con él me daba escalofríos. Pero, ¿y si Jimin tenía cosas que hacer? ¿Y si esto no tenía relación con él? Estaba confundido y aterrado.

¿Qué esperas, inútil?  Apresúrate, si solo te quedas parado sin hacer nada, nunca lo averiguarás.

Me acerqué a ellos, no quería preguntarles, sino escuchar de qué hablaban.

—¿Y si la víctima estaba viva y escapó?

—No puedo asegurartelo, de todas formas, le pedí a Kyungsoo que busque por la zona algún cadáver.

Di algunos pasos y miré de reojo la escena: un callejón con la figura de un hombre en el suelo, mucha sangre en las paredes y un asqueroso aroma que casi me hace vomitar. Entrecerré los ojos para ver mejor quién era aquella persona.

Sentí cómo el aire no llegaba a mis pulmones y mi mente se ahogaba en mis pensamientos más oscuros.

Jungkook estaba completamente desfigurado, había sangre en toda su cara y ropa, sentí un vacío en todo mi cuerpo, ¿por qué había decidido hacer eso?

—Ultimamente te veo muy decaído, ¿sucede algo? —dijo y se sentó a mi lado. Jungkook pasó su brazo por mi hombro. No quería responderle. —Vamos, sé que algo sucede.

—No quiero hablar de eso. —Me acomodé un poco en mi silla y le quité la mano.

—Soy tu amigo, puedes confiar en mí, ¿no es as...?

—¿Alguna vez haz pensado en el suicidio? —Lo interrumpí con aquella pregunta. Él quedó atónito.

—... No que yo recuerde. ¿A qué te refieres, Yoongi? ¿Por qué preguntas estas cosas?

—Jamás lo entenderas. Pienso que es el escape de los malos recuerdos, una manera de comenzar otra vez.

Salió de su silla, se arrodilló al costado de mi cuerpo y tomó mis manos.