Entre Mi Alma Y Tú

Capitulo IV

-¿A dónde me llevas Kyle?- me aferro a la mano su mano cuando siento el suelo irregular bajo mis pies, mis ojos no logran divisar nada en aquella oscuridad pero el resto de mis sentidos está más atento que nunca, bajo el tacto de mis pies el suelo es frio y rustico, como si caminara sobre un montón de piedras y otras veces agua, agua, es eso lo que creo escuchar a la distancia, correr de algún lugar a otro y el olor a humedad que llega a mi nariz casi lo certifica.

-Confía en mi Chloe.

-Confió en ti pero no pasa lo mismo con respecto a mi coordinación, siento que en algún momento me caeré de boca.

-No digas tonterías, yo jamás te dejaría caer.

-¿Nunca?

-Primero caigo yo en la llamas del infierno antes de dejar que tu caigas siquiera un centímetro.

-¿Por qué siempre dices cosas así? Todo un drama Queen.

-Oye- Kyle me hala de la mano haciéndome tambalear pero en vez de caer me estrello contra lo que adivino que es su pecho, siento su aliento en mi rostro, sus exhalaciones frente a mí a cortos centímetros de distancia como si sus labios estuviesen a punto de besarme, cierro los ojos aun y cuando estamos en medio de la oscuridad, no hay diferencia alguna, pero es aquello a lo que me he acostumbrado, cerrar los ojos y volar cada vez que besa mis labios- retráctate- pide, descendiendo entre besos por la piel de mi cuello.

-No quiero, eres una Drama Queen- me da un ligero mordisco, provocando que suelte un pequeño grito entre labios.

-Retráctate.

-Convénceme- ahora recorre mi piel con el tacto de su lengua, saboreándome, jugando con ardientes besos que me enloquecen -Esta bien- cedo cuando mis piernas se vuelven de gelatina -me retracto, dices las cosas más hermosas de este mundo y amo cuando las dices, cuando me tratas como si todo esto fuera una hermosa historia de amor.

-Como esas que lees antes de ir a dormir- susurra, volviendo a estar su rostro frente al mío.

-Como esas historias que leo antes de dormir.

-Vamos, aun nos falta un poco mas- se aleja de mi para guiarme, aun con su mano tomando la mía.

Caminamos en silencio por un rato mas, no me molesta que no hablemos, con él nada es incomodo, no cuando soy tan feliz por el simple hecho de estar a su lado. Confió en él con mi vida, me pregunto si lo sabe, si realmente sabe que estoy cien por ciento segura de que jamás me dejaría caer, yo tampoco permitiría que a él le pasara algo, no si de mí dependiera porque que le pasara algo seria como si le hicieran daño a una parte de mi alma, como si llegaran a lastimar mi otra mitad, sin él estaría incompleta, sola para siempre, perdida.

-¿Ves aquello?- entrecierro mis ojos para encontrar eso a lo cual se refiere, un punto de luz se ve a lo lejano y entonces comprendo que estamos en una especie de cueva, tomo la delantera y camino ansiosa en aquella dirección siendo yo quien ahora lo hala de la mano -¡calma pequeña saltamontes!

-¡Apúrate Kyle!, ya estoy cansada de no ver nada.

-Ven aquí- me alcanza justo antes de cruzar hacia el claro, tapa con sus manos mis ojos ganándose sonidos de protesta de mi parte -¿Confías en mi Chloe?- Me tranquilizo con esas palabras y poso mis manos sobre las suyas, sonriendo por la intriga.

-Con mi vida- no dice nada, en respuesta camina lento, llevándome hacia aquel lugar que no logre ver bien antes de que obstruyera mis ojos, el sonido del agua correr se hace más fuerte, mucho más fuerte como si fuera un montón de agua cayendo sobre algún lugar.

Kyle retira lentamente sus manos de mi rostro dejando que mis ojos se adapten a la claridad y es entonces es cuando lo veo, un hermoso manantial frente a mí, lleno de agua cristalina, rodeado de arboles y flores por doquier; descubro de donde provenía aquel sonido de agua cuando levanto mi rostro hasta el inicio de la pequeña cascada, rio como una niña al empezar a correr hacia el campo de flores, giro entre ellas con mis brazos abiertos y mis ojos cerrados recibiendo chispitas de agua sobre mi rostro. Escucho a Kyle reír muy cerca de mí, entonces abro mis ojos y me detengo, pidiéndole con gestos que se acerque a mí.

-Esto es el paraíso ¿Verdad? He muerto y estoy en el paraíso- digo, acariciando su rostro una vez que está a mi alcance.

-Estas más viva que nunca Chloe, tu siempre estas viva- toma mi rostro entre sus manos acariciándolo con sus pulgares- algún día contare todas tus pecas por cada parte de tu piel.

-No terminaras nunca, tengo más pecas que estrellas en el firmamento.

-Eso son, mis propias estrellas personales. No necesito el cielo si te tengo a ti.

Lo observo en silencio, mi tarea favorita, mirarlo atentamente, sentirme hermosa por la manera en que él me mira; podría perderme en sus ojos pero en cambio es ahí donde me encuentro completa, donde me siento plena, él no necesita el cielo si me tiene a mí, yo no necesito nada mas si lo tengo a él, es así, aunque suene exagerado es así como me siento en su presencia, llena, feliz, deja de importarme todo lo demás, ni siquiera recuerdo que es todo lo demás, tenerlo a él conmigo, amarlo y que él me ame es todo para mí.

-Bésame Kyle- él corta la distancia entre nosotros, vacila, solo lo necesario para alimentar las mariposas en mi estomago justo la dosis correcta de vacilación para que cuando por fin deposita un beso sobre mis labios, estallen todas mis terminaciones nerviosas con su tacto.

-Quédate Chloe, por favor- me suplica, apoyando su frente contra la mía.

-Claro que me quedare ¿A dónde mas querría ir?- lo miro confundida, creyendo que solo esta bromeando conmigo pero la angustia en su mirada es indiscutible.

-No lo sé, siempre te vas y siempre estoy aquí cuando regresas pero no se cuanto más pueda durar Chloe, ya no lo sé.

-¿De qué estás hablando?- dejo de sentir que es una broma, si lo es no me resulta ya divertida.

-No puedo esperarte toda la vida Chloe, ya no.

-Kyle no entiendo nada, por favor explícame- no dice nada, en cambio me vuelve a besar, esta vez con desespero, aferrando mi cabello entre sus dedos, abrazándose tanto a mí que pareciera querer unir nuestros cuerpos, me toma como si temiera que fuera a algún lado pero aun no entiendo a que se refiere. No quiero estar en otro lugar que no sea aquí junto a él ¿Por qué lo dejaría? ¿Qué sentido tiene alejarme de él? Quiero que me escuche, que me deje explicarle que no iré a ningún lado, quiero que deje de temer, que sea sincero conmigo, que me diga que está pasando por su mente.

-Es hora de que te vayas- dice, abriendo distancia entre nuestros cuerpos -se nos acaba el tiempo, debes irte ya.

-Yo no quiero irme- respondo ahora molesta, no entiendo nada y obviamente él no quiere explicarme- Estas siendo incoherente y absurdo Kyle, yo no quiero ir a ningún lado, jamás me iría a algún lugar lejos de ti y mucho menos si eso te hace daño. Te amo- intento acercarme a él, pero cada paso que doy en su dirección él se aleja uno de mi -Kyle...- siento las lagrimas acumularse en el borde de mis parpados, pero me niego a llorar en este momento.

-Ya no puedo hacer esto, estoy cansado Chloe, estoy cansado de esperarte.

-¡KYLE NO ENTIENDO NADA!- grito exasperada -estoy aquí- digo sin aliento, cayendo sobre mis rodillas en medio de todas aquellas flores -estoy aquí...