Entre Mi Alma Y Tú

Capitulo XXV

POV DYLAN

-Están sobrevalorando mi paciencia Dylan- el Dr. Mathius sostenía entre sus dedos el puente de su nariz, el consultorio lucia como si nada hubiera pasado el día anterior, era obvio, alguien como él no tardaría dos minutos con aquel desastre que había dejado su hija –les dije muy claro a ambos que no los quería cerca de Nethan Evander, o al menos creí que había sido claro y no solo seguiste con esa estupidez de que es el hombre de sus sueños, sino que aparte la apoyas en sus infantiles rabietas.

-Con todo respeto doctor, no creo que sea ninguna estupidez y no me parece bien que hable de su hija como si fuera un niña ¿Por qué no puede solo escucharla?

-Hablo de ella como una niña porque es así como se comporta, Rose y Cory se sobrellevan mejor y son unos bebés. Solo es una niña caprichosa y estas cayendo en su juego pero una próxima vez no seré tan tolerante.

-¡Es su hija!- exclamé sintiendo los músculos de mi nuca tensarse -¿Siquiera le importa cómo se siente? Mire, sé que no tiene sentido el modo en que todo esto inicio pero si le diera la oportunidad de explicarse, suena a una total locura pero ella daría la vida por Nethan, además, no hace ningún daño visitándolo.

-¿Ella lo sabe Dylan?- preguntó con su voz cargada de veneno – ¿ella sabe que él está ahí por tu culpa? ¿Sabe que en un desesperado intento de mitigar tu culpa de fuiste a la cama con Meghan Evander? No utilices a mi hija para sentirte mejor, he sido muy condescendiente contigo pero estas yendo demasiado lejos Dylan, no te equivoques, saca a mi hija de todo esto antes de que el desastre sea demasiado. Le has hecho un exagerado daño a esa familia y he decidido callar y protegerte por el aprecio que te tengo, pero si mi hija se ve consumida por las consecuencias de tus actos estarás solo y me encargare yo mismo de llevarte ante los tribunales ¿entendiste?

-No le haga esto, le destrozaría el corazón si la aleja de Nethan.

-Él va a morir Dr. O'brian, lo sabes tan bien como yo, cada día que pasa sin despertar su cuerpo se desgasta más que él otro, sus células mueren, su cerebro pierde un puñado mas de neuronas activas. Ya lo viste, fuiste tú quien estaba ahí cuando tuvo aquel paro cardíaco, quien le practico la maniobra de resucitación y quien coloco las paletas sobre su pecho para traerlo de nuevo a la vida; has seguido este caso tanto como yo y sabes que 5 meses han logrado hacer estragos con su organismo, es cuestión de tiempo antes de que muera definitivamente y de nada sirve que mi hija guarde esperanzas, tiene toda una vida por delante, no tiene porque hacerse cargo de un desconocido.

-Él puede despertar- balbuceé, callando la razón en un rincón de mi cabeza.

-Sí, puede despertar ¿y entonces qué? Suponiendo que no sea un vegetal cuando abra los ojos será mucho menos que el hombre que entro por las puertas de este hospital aquel día, necesitara terapias, aprender de nuevo a controlar su cuerpo, no recordara ni como pronunciar palabra alguna, serán días, tal vez años agotadores hasta que vuelva a valerse por sí mismo ¿te parece que Chloe se merece eso?- soltó una risa áspera, agria y cruel como su honestidad –ella seguro cree que si llega a despertar será como en las películas ¿verdad? Cree que saldrá del coma hablando como si nada hubiera pasado y que en un par de días estará proclamándole su amor, no es así como suceden las cosas en la vida real, así que deja de echarle leña al fuego y detén esto de una buena vez.

-Me prometió dos meses Dr. Mathius y si no lo recuerda aún queda uno por delante.

-Le prometí un mes a Meghan y ella ya está consciente de que estas últimas semanas no son más que una despedida, no me sorprendería si un día no muy lejano accede a que desconecte a su hermano. Pero Chloe, mi propia hija jamás fue parte del trato.