Capitulo VIII

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-Déjame ver si entiendo bien. Has soñado con un príncipe azul toda tu vida y resulta que el hombre en serio existe pero, cuando lo encuentras es un paciente en coma de tu papá.

-Si lo dices así suena bastante sencillo- No dejaba de hacer zapping con el plasma de la sala, no estaba ni pendiente de los canales que pasaba pero tampoco tenía ganas de apagar el televisor y enfrentarme al caos en mi cabeza.

-Chloe ¿Tu me estás hablando en serio?- me enderece en mi asiento y mire a mi amiga incrédula.

-¿Te parece que es algo divertido de inventar? Me siento defraudada Maggie, una cosa es que crezcas y te des cuenta de que los cuentos de hadas no existen pero otra muy distinta es que la vida juegue de este modo con tus ilusiones. Vaya si, genial, si puedes conseguir al hombre con el que sueñas, él seguro esta a la vuelta de la esquina pero cuidado, que puede estar muerto.

-Bueno no está muerto.

-Claro, no seas tan ingenua tiene más de él en el otro lado qué aquí. Mi padre es médico y pase muchos años con él, no necesito que me llenen de las mismas mentiras con las que él llena a sus pacientes y los familiares.

-Eso es, él es médico. Tu no, tu eres una persona muy distinta Chloe, llena de sueños, de alegría, de esperanza, crees en cosas que nadie más lo hace, estas dispuesta a lo imposible, me cansaría de decirte todas las veces que pensaste qué una de esas historias que lees podría hacerse realidad. Pues bien, tienes aquí la oportunidad de hacer de tu vida una gran historia, de creer, de seguir soñando, él no ha muerto ¿Y si solo es una prueba? Imagínate lo romántico qué sería qué él despierte justo ahora que lo has encontrado.

-Esto es una completa locura.

-Chloe tienes que estar con él, intentarlo, descubrir que es lo que está pasando ¿No lo entiendes? De cualquier modo u otro este es tu destino.

-Vaya destino el mío- solté el control del televisor dejando una película de comedia al azar -Aun sigo creyendo que todo esto es un sueño, no lo sé, ya ni siquiera estoy segura de que es real y que no.

-Él pudo haber terminado en cualquier hospital con cualquier otro doctor y tú pudiste quedarte en Londres para nunca más volver a este lugar. Pero las cosas no fueron sino de esta manera, es tu deber salvarlo, te necesita amiga.

-¿Por qué Dylan y tu no creen que estoy loca?

-Tal vez creemos que lo estas, pero todos en el fondo queremos creer que cosas extraordinarias si pasan en la vida real. Apostamos por ti Chloe.

-Él es tan hermoso como siempre lo imagine Mag- me rendí en un suspiro y le di rienda suelta a la esperanza- daría lo que fuera por ver sus ojos, escuchar su voz, ganarme su sonrisa. Hay tantas cosas de él que quiero saber si son como mis sueños, si es él en verdad el amor de mi vida o si todo es una ilusión.

-Entonces descúbrelo, dale un voto de confianza a la vida y confía en el camino por el que te está llevando.

-Ya perdí la cuenta de cuantas historias he leído- comencé a decir, más para mí misma que para mi amiga quien aun me observaba atenta -historias de amor, de miedo, de intriga, historias donde suceden cosas imposible y extraordinarias, donde todo tiene un giro inesperado, pero esto es distinto. Es demasiado real para ser cierto.

-Chloe tú lo viste con tus propios ojos.

-¿Qué vi?- me levante del mueble y en cambio camine de un rincón a otro de la sala -vi a un hombre apuesto conectado a una maquina y un montón de mangueras, una imagen bastante deprimente cabe destacar, pero ¿Qué sé yo si es o no Kyle? No es como si recordase por completo su rostro una vez que me despierto, ¡además escúchame Maggie! Esto no tiene nada de sentido- recordé a Kyle entre sueños pidiéndome una y otra vez que no fuera a ningún lado, que me quedara con él -iré a dormir.

Entre Mi Alma Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora