Capítulo 18 No, no, no, ¿Ya había dicho no?

2.2K 163 21
                                    

Luego de que los jueces nos calificaran y que nos hubieran dado las indicaciones para la siguiente prueba, Damon y yo decidimos ir a dar una vuelta para poder hablar un poco.

-¿Y ahora qué?-preguntó mientras caminábamos hacia la Torre de Astronomía.

Mire el reloj que Remus me había dado hace mucho tiempo.

-En unos momentos estará lista la fiesta sorpresa que Fred y George prepararon para mi hermano y para mí-sonreí

Nos quedamos en silencio por unos minutos antes de que le preguntara:

-¿Te gustaría ir a Nueva York? Quiero ver a Caroline y se lo mucho que te gusta poder comer sin que te descubran.

Lo pensó un momento antes de asentir.

-Supongo que sería grosero no ir a tu propia fiesta así que propongo que vayas media hora y nos vemos aquí en cuarenta y cinco minutos-respondió sonriendo

Asentí y me levante de mi lugar.

-Nos vemos en cuarenta y cinco minutos-antes de que me diera cuenta, ya estaba en la entrada de la torre de Gryffindor, sola.- Gracias, Damon-grite al aire.

Dije la contraseña y entre a la fiesta en la Sala Común donde había desde galletas con jugo de calabaza hasta comida con bromas y whisky de fuego.

-¡Hasta que te dignas a llegar!-me reprendió George a mi lado derecho

-Creíamos que te habías perdido o algo por el estilo-apoyó Fred pasando su brazo sobre mi hombro.

-Lo siento, chicos, me entretuve un poco, pero ya estoy aquí, ¿no?-por ahora, pensé.

Los primeros diez minutos, me divertí bastante viendo como Neville se transformaba en un canario por una broma de Fred y George (Okay, tal vez yo ayudé un poco). Los siguientes diez minutos, baile y tome un poco de whisky de fuego hasta rozar el punto final de la sobriedad. Por último, subí a mi habitación a preparar mi maleta, lleve algo de ropa, dinero en todos los tipos que tenía, mis armas, por supuesto, y el ungüento que Madam Pomfrey me había dado, me cambie de ropa por algo que no estuviera quemado y salí de mi habitación no sin antes haber guardado mi huevo de oro en un lugar seguro.

Cuando bajaba las escaleras, escuche un grito general seguido de una melodía.

-¿Por qué gritan?-les pregunte a todos, ganándome una mirada-¿Qué?

Harry me jaló del brazo, llevándome a un rincón.

-¿Te sientes bien, hermana?-mirándome como si estuviera loca.

Lo mire mal.

-¡Por supuesto que me siento bien!-espete-¡Ustedes son los que están locos! ¿Quién grita por una melodía?

La mayor parte de la gente ahí me vio nuevamente como si acabara de salir de Azkaban.

-Okay, ignoren que dije algo-se encogieron de hombros y siguieron con la fiesta-. Oye, hermanito-llame su atención-, volveré para el lunes, iré a visitar a Caroline, su padre murió hace poco y quiero ir a apoyarla...

Decidí evitar decirle que posiblemente iba a ir a una fiesta en la cual, me emborracharía hasta el punto de no recordar quién era.

-No irás-respondió sin más

<<Si iré>> respondí saliendo por el retrato de la Dama Gorda.

Harry me siguió.

-¿De qué sirve que sea mayor que tú si no me haces caso?

Lo mire divertida.

-Eres solamente tres minutos mayor que yo.

Los mellizos Potter y el Cáliz de Fuego. (Cuarta Temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora