Scream: Final Cut

Tres - Pesadilla en Elm Street (EDITADO)

Jueves a la noche

Liz llegó a la estación de policía preocupada. Habían pasado varios días desde que no veía a su hermana, y después de lo que encontró en la habitación de Motel, no quería esperar más.

Primero permaneció de pie en la sala de espera, luego se sentó, después la ansiedad la obligó a pararse y tratar de buscar a un oficial.

Por suerte, un tal Michels estaba en la recepción hablando con una mujer menuda y de rostro serio.

Se acercó a él y le tocó el brazo.

- Hola, oficial.- Habló ella con voz temblorosa.

- Sí, ¿qué necesita?- El oficial era moreno, no parecía yankee, y era atractivo pero serio.

- Quisiera denunciar una desaparición.- Las palabras vinieron solas y no pudieron parar.- Mi hermana ha desaparecido hace tres días. No tengo noticias de ella y me desespera.

Michels entonó los ojos y se giró para tenerla de frente. Un teléfono comenzó a sonar y la señora menuda lo agarró.

- ¿De quién se trata?- Averiguó el oficial sacando un anotador pequeño y una birome.

- Es mi hermana. Para facilitarte las cosas diré que es madre de la chica que se suicidó. Mi sobrina, Samantha.-  Sentenció Liz aliviando su ansiedad.

- Oh. De acuerdo.- Contempló Michels guardando el anotador y la birome.- Le diré a un oficial que rastree su teléfono y luego iremos a su casa...

Liz sacó un papel de su bolsillo y le dió la dirección del motel donde se alojaba.

Michels iba a hablar pero la recepcionista lo detuvo.

- Una chica encontró algo horrible en el porche de su casa, le dije que enviaré dos patrullas. ¿Te anotas?

La mujer le dictó la dirección de la calle y Liz supo de quién se trataba.

Michels asintió y se disculpó con Liz para ir a la dirección designada. Ella asintió y se dió la vuelta, salieron por dónde vino.

23:30

La Policía llegó a la casa de la familia Jhonson, y Judie estaba completamente paralizada sin poder hacer nada.

- ¿Te encuentras bien?- Le preguntó el oficial Michels mientras se acercaba a las escaleras, dónde Judie intentaba calmarse.

Ella no contestó y su hermano Paul se sentó junto a ella. Acababa de llegar, y cuando vió las patrullas estacionadas fuera, se metió corriendo a la casa.

- Judie...- Le susurró su hermano mientras apoyaba una mano en su hombro. Él tenía apenas 15 años, tres menos que ella.

El padre de ambos, Steve dejó de hablar con el oficial y regresó al interior de la casa.

- Hija... todo va a salir bien. Vamos a encontrar al que hizo esta broma pesada, yo voy a encontrarlo.- Le murmuró con los ojos vidriosos.

Los policías se llevaron la caja que contenía la cabeza de chancho y se marcharon.

- Tengo miedo.- Fue lo único que Judie pudo decir rodeada por su familia. Ella sabía que no se trataba de una broma, sino un aviso, el asesino de Alma iba a cazarlos y quizás ella era la siguiente. No quería ni pensarlo.

Paul y Steve cruzaron miradas de preocupación.

23:33

"No te das una idea de lo que voy a echarte de menos. Ya no iremos de compras juntas, ya no me dirás qué vestido me queda mejor, ni tampoco me darás consejos sobre chicos. Ya no volveré a verte, pero voy a extrañarte demasiado. Te amo, Alma."