Una Rubia Pesadilla

Polizontes

Narra Penni

Cuando me enteré de que Percy y sus amigos se irían de viaje, me preocupé, porque teníamos que pasar el mayor tiempo posible para hacer que se fijara en mi.

Los dioses me habían puesto en contacto con Michael y sus amigos, aunque Mary era un poco a obligadas. Michael (no se de donde) estaba locamente enamorado de Annabeth, lo cual me sirve.

Ahora tenía un plan: Colarme con los chicos en el barco y viajar con los semidioses, quizás se interesaran un poco mas en nosotros.

Némesis me dijo que tenía que escoger a las demás personas que podrían ver a través de la niebla, por lo que escogí a: Mitch y Sofi (fueron los primeros), Michael, Jimmi, Mary (obligada), Lili, su hermano menor Ivan, Victoria y Alison.

Yo solo esperaba que Percy entendiera la razón por la que hacía eso, que vuelta que lo quiero tanto que iría con él a donde fuera. Los demás pensaban igual.

Los dioses se encargaron de que nuestros padres pensaran que iríamos a no se donde, y nos dieron el permiso.

-Bien, ellos ya están navegando, nosotros los dejaremos en un lugar oculto, luego ustedes sabrán cuando es momento de salir. -decía Eros.

-Tendrán comida, agua y... Tendrán que buscar la manera de encontrar el baño. -completaba uno de sus hermano.

-Bien, ya podemos irnos. -dije yo:la líder.

Ellos se miraron, sonrieron, nos miraron y Némesis dio un ultimo concejo.

-Esfuercen se.

Cuando abrí de nuevo los ojos, estaba en una especie de establo, teníamos nuestras mochilas, estábamos ocultos tras un montón de heno y cajas.

-¿Funciono? -preguntó Sofi.

-Claro que si, idiota. -dije molesta.

-¿Y ahora qué? -preguntó Jimmi.

-Esperar. -dijo Michael.

Ahora estaba nerviosa, ¿si se molestaban? ¡claro que se molestarían! Pero lo hacíamos por amor.

Narra Frank

Cuando partimos a la misión, todo parcial prometedor, la profecía sonaba tranquila, a excepción de un detalle: Mencionaba una sorpresa.

Annabeth y Percy dieron la orden de mantenerse alejados de Florida, no querían entrar de nuevo en el mar de los monstruos.

-¿Dónde tenemos las cajas de néctar? -preguntó Annabeth.

-Creo que están en los establos, ¿por qué? -dijo Hazel.

-Deberíamos traer una caja, para tenerla a la mano. -dijo Annabeth.

-Ftank, ¿puedes traer una? -dijo Percy.

-Claro, ¿vamos Hazel? -dije.

-Si. -contestó mi novia.

Ambos bajamos mientras hablábamos de cualquier cosa, llegamos a los establos y vimos las cajas de néctar junto a un par de pilas de heno.

-Tomemos una de esas y vámonos, no me gusta estar mucho tiempo aquí. -dije.

-¿Por lo de Percy y Annabeth? -preguntó Hazel con una sonrisa.

-Sabes que si. -dije sonrojado.

Ella soltó una carcajada y tomó una caja, solo para ver a unos chicos ocultos tras ellas. Hazel soltó un grito y ellos también, tenían mochilas y estaban comiendo unas papitas.