Amor Prohibido - Melepe

Capitulo 19 - Sin is not Friendly

Marta Riumbau POV.

Era de noche. No dejaba de pensar en lo que había pasado días atrás.

Maldita Cadepe.. la quiero muchísimo. Pero lo que ella no se podría imaginar es que vivo enamorada de su.. novio. Me pongo mal al decirlo. Si por algo me preocupé fue porque quería ser amigable. Pero ya he callado bastante. Ahora tengo que poner manos al asunto cuanto antes. No quiero ver a Juan melancólico por su preciosa María Cadepe a la cual envidio tanto.

Pues esta obsesión llega cuando.. bueno. La típica presentación.

[Flashback]

—Marta, este es mi novio Juan. Juan, esta es una de mis mejores amigas Marta Riumbau.—decía esta sonriendo cogida de su mano.

—Hola, Marta.—me sonrió y me dio dos besos en las mejillas. Estaba buenísimo.

—Mucho gusto conocerte, Juan.—sonreía como una tonta, hasta María pudo notarlo.

María es un tanto.. posesiva. Lo que es suyo, no lo comparte con nadie más. Incluso a los tíos.

[Fin de Flashback]

Es hora de actuar. Cojí mi móvil y lo llamé cuanto antes. Le necesitaba.

Sonaron los ridículos pitidos, hasta que cojio la llamada.

—Hey, Marta.—dijo este. Parecía que estaba en un sitio con mucha gente.

—Juan, ¿donde estás?.—le pregunté nerviosa.

—Estoy en un antro, solo.—tomó un trago—¿Quieres que nos veamos?—preguntó.

Ya os podéis imaginar mi reacción. ¿Será que le gusté aquella vez?

[...]

Había quedado con él en una calle de Madrid. Eran la 1:05 a.m. y me encontraba caminando sola. Mis brazos me reconfortaban del frío. Hasta un momento en el que sentí el frío en mi interior. Allí estaba apoyado él en la pared fumándose un.. porro. ¿Desde cuando se mete cosas así? No importa, le hace más sexy de lo que ya es.

Me acerqué, el fijó su mirada en mi penetrante y fría como el hielo, esperando una explicación al por qué había venido desde mi casa hasta aquí, a altas horas de la noche.

—Juan.. yo estoy aquí por qu..—interrumpió.

—Cállate Marta.—dijo cogiendo de mi cintura para acercarme a él—Estás aquí por que ambos no nos hemos podido olvidar desde aquella vez, ¿verdad?.—sonrió muy cerca de mi boca, luego empezó a besarme lentamente.

Cómo deseaba este momento.

—¿Y María?.—logré decir mientras este besaba mi cuello.

—Ya no me importa María.—dijo.

—¿Donde está María?.—le separé de mí.

—Hace días que no la veo.—puso sus manos en mis mejillas—Pero ya no importa, Marta. Ella tiene a alguien más y no descifro quien es. ¿Te ha contado algo?

—No te voy a decir quien es.—dije. Aun sabiendo que envidio a María, no diré nada a Juan. María a pesar de todo es una de mis mejores amigas.

—Bueno, da igual. Vayámonos a un lugar apartado de aquí.

—Juan, no hay nadie. Aquí.

—Entra a mi coche.

Le obedecí. Empezó a besarme el cuello quitándome la camiseta, tocándome las tetas y jugando con ellas. Llego hasta mi boca introduciendo suavemente su lengua.

Comenzó a hacérmelo tanto como quise. Me sentía culpable por momentos pero aprecio sus embestidas sobre mí. Puede sonar algo sucio, igual como mi reputación ahora.

No sentía nada. Mi conciencia se nubló por completo causada por tanto placer.

Que estoy haciendo..