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22/03/2023
- ¿Tus padres?- pregunté entrando a la casa de Mateo, con la respiración entre cortada por tanto llorar.
- No están, supongo que fueron a visitar a mi hermano- respondió cerrando la puerta de ingreso.
Caminé un poco, pero no pude contenerme más. Volteé a donde se encontraba él y lo abracé, mientras lloraba sobre su pecho. El accedió al abrazo, mientras en ciertos momentos me daba besos cortos en la cabeza, en señal de que estaba segura con él.
Después de unos cuántos minutos en aquella posición, me separé de él y lo miré. Nunca me había encontrado tan indefensa ante una persona que no sea él. Ha visto a la Jackie más destrozada, más lastimada y más vulnerable.
- Debes secarte, no quiero que te resfríes- dijo Mateo mientras tomaba de mi mano y me guiaba a la parte superior de su casa- te traeré una toalla- dijo mientras salía de su habitación.
Entró nuevamente con toallas en su mano, y me ayudó a secar mi cabello mientras yo intentaba dejar de llorar y secaba un poco mi rostro y cuerpo.
- Toma- se acercó a su armario y tomó un pantalón de pijama junto con un suéter over size- no te quedes con aquella ropa mojada, puedes vestirte, yo usaré el baño- dijo ahora.
Hice lo que me dijo, pude sentir un poco de calor ante el frío que estaba sintiendo. Era reconfortante la sensación.
Salió Mateo del baño y me miró de pies a cabeza, el se encontraba únicamente con un pantalón a cuadros de pijama.
- ¿Deseas algo más? ¿Puedo hacer algo más para que te sientas un poco mejor?- preguntó cerca mío.
- Haces mucho más de lo que yo desearía, gracias por estar conmigo siempre- sonreí mientras se cristalizaban un poco mis ojos, porque sentía que no había nadie más en este mundo en quién confiar más que en Mateo.
- Eres una mujer valiosa Jackie, todo el dolor que estás sintiendo ahora mismo, en unos cuántos años más, lo verás como una broma. Todo lo malo pasa, y lo bueno siempre viene en mejores momentos- me abrazó.
- ¿Puedo quedarme aquí?- pregunté en el abrazo.
- Claro, yo puedo dormir en la habitación de mis padres, tu quédate aquí- respondió separándonos y tomando de mi mejilla.
- No me dejes sola- dije- duerme conmigo- salió de mi. No quería hacer nada íntimo, solo quería sentirme querida por un momento, sentirme protegida entre toda esta mierda.
- ¿Segura?- preguntó Mateo- no quiero que te sientas incómoda.
- Solo quiero un abrazo hasta dormir- respondí.
- No prometo portarme bien- dijo bromeando, haciendo que finalmente soltara una sonrisa, porque era reconfortante aquella sonrisa entre un gran momento de lágrimas.
Entramos en su cama, nos mirábamos a los ojos como si tuviéramos una profunda conversación sin tan si quiera decir una sola palabra.
- Tengo que decirte algo antes de que todo termine mal- dijo Mateo seriamente- pero no lo haré ahora, primero afronta toda la mierda que estás viviendo y luego te cargo con lo mío. Prometo que no te hará daño ni te lastimará de la manera en la que te encuentras en este momento. Solo quiero que veas todas mis realidades, todo lo que soy, sin secretos y sin tener que ocultarte mi historia. No se desde cuándo haz hecho que seas la única persona en quien pienso día, tarde y noche, pero estoy seguro de que esto no va a terminar. Por que yo puedo darte todo lo que tu desees.
- ¿También me saldrás con malos momentos?- dije cansada.
- No, quiero decirte quién realmente soy. Pero no quiero traerte más cosas a la cabeza, todo será a su tiempo Jackie.
- Prométeme que no me romperás aún más el corazón.
- Te lo prometo- me miró nuevamente a los ojos, para luego acompañar su última frase con un beso.
Un beso que ambos esperábamos desde hace mucho. Porque estábamos creando una relación mucho más que una amistad. Ambos sentíamos aquella conexión cada vez que había un cruce de miradas, o cada que ambos nos abrazábamos o terminábamos pegados el uno con el otro.
Tal vez debo hacerle caso y dejar que las cosas fluyan, porque no debo traer más cosas a mi cabeza que promete Mateo no me lastimarán. No puedo negar que muy dentro de mí sabe que las personas siempre vienen con sorpresas y muchas veces de las malas, pero ahora debo aprender a confiar y a dejarme amar, porque él me ha demostrado ya varias veces que no le importa nada más que yo, nada más que mi bienestar.
Puede que esto termine de igual manera o peor que lo mío y lo de James, pero por ahora quiero dejar las aguas tranquilas en lo primero que en muchos años me trae felicidad y confianza.
(***)
- La parte más dura está por comenzar, tu mantente firme y sigue adelante Jackie, si necesitas algo solo llámame y vendré a verte en cualquier momento- dijo Mateo con un beso en mis labios frente a la puerta de mi hogar. Era momento de afrontar la realidad.
- Gracias por todo- dije tras el beso y respirando profundo antes de entrar.
Caminé en dirección a mi habitación, deseando no escuchar lo que quería escuchar.
- ¿Acaso ya no vives aquí Jackie?- dijo Nelly desde su habitación, bromeando.
No respondí, no estaba lista para afrontarlo.
- ¿Ahora ya no hablas?- dijo nuevamente. Pero no pude soportar más y entré a su habitación.
- ¿Cuándo me ibas a decir lo tuyo con James?- dije molesta- ¿acaso me creíste tan imbécil para no enterarme de lo que estaban haciendo?- suspiré- acabas de enterrar el amor de hermana que tenía contigo. Porque más que un hombre, me mentiste, jugaste con mis sentimientos, siempre te pusiste a ti primero, y ahora ¡mírate!- la señalé- ¡estás embarazada de la persona que más daño me hizo!
- Jackie, no lo mal pienses- dijo ahora ella con lágrimas en los ojos.
- Aquí terminó esto Nelly, quédate con James, disfruta de tu familia con James.
- ¿Cómo lo supiste?- supo responder después de todo lo que le dije.
- ¿Te importa más saber cómo lo supe? ¿De verdad no te importa cómo estoy?- cayeron lágrimas por mis mejillas.
- Te lo íbamos a decir, solo que, varias cosas se cruzaron en nuestros caminos- dijo ahora rompiendo en llanto.
- Es increíble que a pesar de toda tu mierda, y todo el daño que me causaron los dos, sigues haciéndote la víctima Nelly- suspiré por última vez- respeta tu cuerpo y tu mente, porque sé que eres más que una mala persona. Ahora deja de pensar en ti, y piensa también en el bebé que traes allí, que espero que se lo hayas dicho a James, porque debe hacerse responsable por primera vez de sus errores, o bueno, en este caso de su hijo- salí de allí molesta, dejando atrás un gran peso que traía encima y liberando un poco aquella cuerda imaginaria que se formaba en mi garganta cada vez que creí que James me lastimó, pero no, ahora noté que lastimó más a Nelly, porque el no solo no la amaba, sino que también, jugó de la manera que quiso con ella.
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OLVIDEMOS APARIENCIAS
Teen FictionMentiría si digo no amar el físico, porque es lo primero en lo que se enamora mi corazón. No entiendo qué logró hacer conmigo para tenerme a sus pies, somos completamente diferentes. Ella no pertenece a mi mundo, pero su hermana sí. ¿Acaso te impor...