Amor infinito

La fiesta

*Narra Hugo*

-¿Cómo sabías que eran mis flores favoritas?- me pregunta mirando las flores.

-Digamos que soy como una especie de adivino.- le guiño el ojo.

Ella sonríe y me abraza.

-Y eso no es todo.- le digo.

-¿A no?-

-Mañana por la noche quiero que vengas a mi casa a cenar, estaremos solos, una cena romántica.-

Se queda callada, me mira extrañada.

-Claro.- contesta al fin.

La llevo de vuelta a su casa, era un poco más tarde de la hora de comer así que paro en un McDonalds y pedimos algo para comer mientras.

Cuando paso por su puerta ella me dice:

-Aparca aquí si quieres.-

-¿Tu madre no está en casa?-

-Sí, pero da igual.-

Aparco y me besa.

-Gracias por este increíble día.- me dice.

-A ti.-

Nos quedamos mirandonos.

-¿Hablamos esta noche?-

-Ehm... he quedado con unos amigos, te hablo cuando vuelva si quieres.-

-Claro.- me sonríe.- Diviértete.-

Nos volvemos a besar y sale del coche.

*Narra Elena*

Cuando llego a casa mi madre está sacando la ropa de la lavadora, me mira y me sonríe.

-Hola, cariño.-

-Hola, mamá. ¿Necesitas ayuda?-

-No, tranquila.- se levanta y me acaricia la mejilla.- ¿Qué quieres de comida?-

-Cualquier cosa.-

-Vale.-

Subo a mi habitación y me quito la ropa. Me meto en la ducha.

Cuando salgo bajo a ver como va la comida y como veo que está terminando me pongo a poner la mesa.

-¿Vas a contarme quién era el chico con el que has venido?-

Trago saliva nerviosa.

-Ehm...-

-Tranquila, es muy mono.-

Me rio, no puedo evitarlo.

-¿Es tu novio?- me pregunta.

-Algo así.-

-Me alegro.- me da un abrazo.

-¿Y eso?-

-¿Te extraña?-

-Pues sí, un poco.-

Me ayuda a poner la mesa. No volvemos a hablar del tema, ella me cuenta algunas cosas suyas y yo la escucho.

*Narra Hugo*

Son las 9 así que me ducho para prepararme para la fiesta. Cuando salgo Luis me está llamando. Cojo el móvil y contesto.

-¿Sí?-

-Solo era para asegurarme de que vendrías?-

-Claro, estoy prepararndome, a las 10 estaré allí.-

-¡Genial!, aquí nos vemos.-

Cuelga.

Termino de secarme y me pongo algo decente para salir. Me peino un poco, cojo las llaves del coche y salgo hacia abajo. Me encuentro con mi madre, me despido y salgo de camino.

Cuando llego a casa de Luis el ambiente es bastante bueno, estámos todos los colegas del grupo, hablamos durante un buen rato y luego Luis sacó algo de comer y de beber.

Cuando se hizo más tarde la mayoría comenzó a irse y Luis se acercó a mi.

-Puedes quedarte si quieres, ahora viene más gente.-

-¿Y eso?-

-Como sabía que esta gente no se quedaría hasta tarde hice otra fiesta aparte con otros amigos más tarde. Si te quedas puedo presentartelos.-

Miro la hora y veo que aún es temprano así que decido quedarme a ver que amigos vienen.

Al rato comienza a venir gente totalmente desconocida bastante arreglada. Algunos chicos y chicas. Luis comienza a presentarme gente pero soy incapaz de quedarme con los nombres.

Cuando veo que el ambiente ha cambiado decido que es hora de irse.

-¿A dónde vas?- me pilla uno de los amigos desconocidos. Me lo había presentado antes pero no recuerdo su nombre.

-Es tarde, me voy a casa.-

-Quedate un rato más.- me tiende una copa.

Acepto y me quedo un poco más.

Para cuando me quiero dar cuenta han pasado dos horas y he bebido demasiado, problema, ya que ahora no se como voy a volver a casa si no puedo conducir.

La fiesta continua y estoy muy cansado. Me siento en el sofá y me quedo medio dormido mientras escucho la música de fondo y la gente sigue bailando a mi alrededor.

-Hola.- es una chica.

-Hola.-

-¿Cómo te llamas?-

-Hugo, ¿y tú?-

-Sara.-

Se acerca a mi.

-¿Cómo estás?-

Cada vez está más cerca.

Comienza a tocarme la mano y a subir por el brazo.

-¿Qué haces?-

-Nada.- me está acariciando la cara.

-¿Nada?-