Mi vida empieza y acaba contigo

LXXXIII

Alaric

Salí con Liv, no avisamos a Hugo que saldríamos ni mucho menos a Lluvia, además quería pasar una bonita mañana con mi futura esposa.

-Mi amor, vamos a desayunar - Liv me abrazo mientras caminábamos.

-Sí cariño vamos - Contesté.

Entramos a un pequeño restaurante, nada novedoso ni caro, ordenamos algo sencillo. Me apetecieron tartas al igual que a Liv, no era una maravilla ese platillo, pero me encantaba comerlo. Regresamos al hotel, acompañe a Liv hasta la habitación y yo volví a salir, pero esta vez me había alistado para la piscina, tenía esa sensación de querer nadar un buen rato casi como un pez, aunque sonará tonto yo quería hacerlo. Liv no quiso acompañarme por que decía que se sentiría rara que la mirarán con un vientre tan grande, trate de convencerla pero no lo logre.

Mientras nadaba vinieron a mi viejos recuerdos que no sabia que aún tenia, llegaron a mi como viejas fotos dentro de mi mente, era mi madre enseñándome a nadar, podía recordar todo lo que había pasado con ella aquel día de vacaciones que habíamos tenido ya hace mucho tiempo, aun era un niño. Me detuve al borde de la piscina y en lugar de que ese recuerdo me afectará me sentí mucho mejor que antes, una sonrisa se dibujo por si solo en mi rostro.

Después de un rato regrese a la habitación, Liv miraba tv y yo entre al baño y me ducha, me cambie y me senté con ella en el pequeño sillón. De pronto sonó la puerta y me levante a mirar quien era.

-Hola Alaric, ¿Hugo y yo nos preguntábamos si quieren venir a comer algo con nosotros?

-Creo que no estaría mal, ahora vamos - dije a Lluvia.

-Vale, los estaremos esperando en el lobby.

Cerré la puerta, tome la tarjeta - llave de la habitación, busque una cazadora y un abrigo para Liv y salimos para reunirnos con los demás, el día iba oscureciendo más y más, quizá llovería pero no sería hasta la noche, o eso era lo que habían dicho en el resumen del clima. Tomamos el elevador y bajamos hasta el lobby.

-Vamos ahí están - le dije a Liv y tome su mano.

-¿Listos? - Hugo preguntó.

-Sí - contestó Liv.

-Bueno vayámonos.

Fuera entregamos la ficha para que trajeran devuelta el auto y poder ir. Antes de llegar al una tipo plaza, había demasiado tráfico, pensábamos que nos llevaría gran parte de la tarde poder llegar, aunque no fue así pudimos conseguir estacionamiento e ir a comer tranquilamente.

Entramos en un stand de comida de todo tipo, había un grupo musical tocando hasta la esquina del stand, aunque se podían escuchar fuera de él. La comida realmente era buena, me encantaba el pozole podía pero no era nada común que lo comiera.

Saliendo del stand, dimos un par de vueltas alrededor de la plaza, vimos ropa, joyería, electrónicos, lo típico, además el tiempo comenzaba a correr y debíamos regresar temprano ya que debíamos tomar el vuelo devuelta a casa por la mañana y obviamente no debíamos perderle, así que regresamos al hotel, nos dividimos en el elevador, Hugo y Lluvia se quedaron un piso abajo del nuestro y nosotros subimos hasta nuestra habitación.

-Oye cariño - Liv me miró.

-¿Que pasa?.

-Ven, quiero estar contigo.

-Jajaja, bebé nos queda una vida juntos para estar todo el tiempo.

-Lo se, pero aún así quiero estar todo el tiempo posible junto a ti y nunca dejarte ir.

-Vale cariño, voy espera solo un segundo -deje mi cazadora sobre la silla en el cuarto.

Platicamos hasta tarde, reímos, nos besamos. Antes de irnos a dormir preparamos el equipaje y lo dejamos listo para que por la mañana no saliéramos demasiado tarde.