Con Sinuhe ya éramos amigas, el señor Cabello, se acercaba a mi de a poco, pues ellos ya sabían lo que me había sucedido, pero aún así ellos querían adoptarme.Yo sabía que él no estaba muy de acuerdo con mi adopción porque ya era muy grande y además había sufrido mucho, pero él haría de todo porque su esposa estuviera feliz.
Así que cuando ellos me iban a visitar; llevaban a Clara, mi nueva psicóloga, con quien conversaba de todo mi pasado, de mi sufrimiento, de mis padres, de la abuela, del maldito doctor y también dejábamos unos minutos para que ella me contara sobre su hija Lauren.
Cuando ya habían pasado dos meses, los cabello ya me habían adoptado; había llegado el día de despedirme de todos, lloré de felicidad y de pena, pues aunque no había pasado los mejores días de mi vida ahí, habían personas que si me quisieron y me hicieron sentir bien, como una de las monjitas, la madre Aurora, la profesora Stuart y algunas de las niñas, que era tan graciosas y locas que me hacían reír cada vez que yo estaba triste.
Me despedí de cada una de ellas con un abrazo y me fui con mi mochila y las pocas cosas que tenía, tomé la mano de Sinu y nos fuimos.
Si la hubieran visto, su cara irradiaba felicidad, se notaba tan contenta que hasta el señor Cabello sonreía con solo verla, y también yo; pues sabía que desde ese día en adelante tendría un nuevo hogar y una nueva familia.
El viaje en coche duró más de dos horas, yo ya estaba cansada y tenía un poco de hambre; pero cuando llegamos afuera del lugar que sería mi nueva casa todo eso pasó, dejándome impactada por el tamaño, era una mansión, imnensa.
Era de tres pisos, pintada de un blanco invierno, una hermosa entrada con una pileta y mucho patio, ideal para jugar y pasar el tiempo con ellos.
Cuando entramos quedé aún más impactada, todo era muy elegante, espacioso y mucho más; pero en ese momento estaba tan asombrada de como había cambiado mi vida, que lo único que pude hacer fue ponerme a llorar y correr a abrazarlos a ambos.
- hey, pequeña, ¿Qué sucede?... no te gusta? - me preguntó sinuhe mientras yo asentía dándole a conocer que si me gustaba, ese lugar era impresionante ¿Cómo no me iba a gustar? - entonces Qué pasa cariño? - los miré y les sonreí, suspiré y los volví a abrazar.
- yo solo estoy muy feliz, estoy asombrada aún por todo, me siento maravillada con ustedes, asombrada de como a cambiado mi vida... yo... muchas gracias por adoptarme, espero ser una buena hija para ustedes - Sinuhe en ese momento estaba llorando, Alejandro besó su cabeza y nos abrazamos los tres.
Ese día, me mostraron la casa completa, me entregaron mi propia habitación, que estaba repleta de peluches y de cosas que me encantaban, conocí el salón de música, el de juegos, la cocina, ¡oh dios!; la señora Clarents fue la mejor, nos dio de comer inmediatamente cuando entramos a la cocina, estaba todo muy exquisito, incluso ella se sentó con nosotros, Sinuhe me explicó que en esa casa no les gustaba la degradación, ni nada por el estilo, que todos respetaban a los demás y sus decisiones, no importaba religión, tus gustos musicales, como vistes, donde naciste, color de piel, si te gustan los chicos o chicas, si eres el presidente de una empresa conocida o haces el aseo en ella, todos los trabajos son dignos, estás trabajando para ello no?; estás trabajando para ganar dinero y sostenerte en este mundo; todos somos seres humanos a los que nos gustan cosas distintas, somos seres unicos e irrepetibles, y nadie en el mundo nos puede cambiar.
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Aquí un nuevo capítulo, de verdad espero les guste :)Bye
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No Me Ames - Camren Fanfic
Fiksi PenggemarCamila una chica que ha sufrido mucho en su corta vida forzándola a convertirse en la reina del hielo como la llaman algunos; Lauren una buena chica con el solo propósito de ayudar a sus padres. Camila necesita a una asistente y Lauren necesita el t...