Toqué la ventanilla, no iba a entrar a su auto. Al segundo el cristal bajaba lentamente, doblé mi espalda un poco para mejorar la vista hacia dentro.
-entra.- murmuró.
-no.- me negué rotundamente.
-10 puntos menos.- sonreí burlona.
-recuerda que no me importa ya los malditos 100 puntos.- murmuré con mala cara, este alzó una ceja.
-¿por qué estás enojada?.- sonreí de nuevo, cínica.
-por algo que ni te incumbe.- murmuré y enderece mi cuerpo para recostarme del auto, crucé mis brazos esperándolo.
Este sin mas remedio salió y rodeó el auto para alcanzarme, lo sentí en frente mio.
-¿sobre que hablaban tú y la novia de mi padre?.- pregunté.
-¿de qué hablas?.- preguntó.
-la mujer que te fue a ver hoy, con la que hablabas en la salida.- juntó sus cejas.
-no te interesa.- murmuró. Sonreí.
-¿no me lo dirás?.- pregunté, mirandole y parándome del auto.
-por ahora no.- lo miré enojada.
-¡yo quiero saberlo ahora!, no cuando a ti te dé la gana de contarmelo.- crucé mis brazos, caprichosamente.
-si aceptas terminar los últimos puntos de la materia.- se acercó a mi, abrí mis labios mientras lo miraba.
-no necesito saber nada. Gracias.- me volteé para caminar.
Sentí que me seguía.
-¿por qué eres asi?.- preguntó, yo no dejé de caminar.
-déjame en paz, maldito acosador.- aceleré el paso.
Me agarró el brazo y me volteó, haciendo que mi pecho chocara con el suyo.
-¡sueltame!.- grité en su rostro.
-¡te necesito!.- susurró.
-¡vete a meterselo a una burra!.- grité soltandome.
-no de esa manera, Jo.- se acercó a mi.
-¿por qué a mi?.- pregunté.- hay más chicas en el colegio, y además, hay más CHICAS y de tu EDAD, en el instituto.- me volteé para seguir caminando.
-¿hablas de la profesora McGuire?.- preguntó, se le escapó una risita.
-¡cállate!.- grité.
Los autos estaban aparcados en las aceras. Y él aprovecho eso.
Me haló del brazo y me cargó, recostandome del auto y haciendo que mis piernas se quedaran en su cintura.
Su cara estaba cerca de la mía.
-sólo tú, gobiernas en mi.- miré su rostro.
-déjame en paz.- junté mis cejas.
-no.- negó.- ya que te encontré no puedo dejarte ir.- murmuró.
-no podemos estar juntos.- traté de persuadir.
-claro que si. Solo hay que hacerlo.
-yo no quiero nada contigo.
-yo si quiero todo contigo.- miré el cielo y maldije por lo que iba a hacer. Lo besé.
Era un beso suave, delicado, pero apasionado dentro de lo que cabe. Lindo.
Nos miramos. Toqué el suelo y él me soltó.
-nos vemos mañana.- sonrió, lo observé mientras se retiraba de las calles del vecindario. Imbécil.
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Iguales (Two Souls #2)
VampiroAño 2032, Tacoma, Washington. Joyce Parker es loca, sincera y un poco necia. Nunca se había imaginado que todo esto le pasaría ella o que todo esto le pasó, solo que ella no lo sabía. Jo, debe recordar quién es en realidad y decidir si Balthasar es...