Mi Hombre.

34. Bastian

Primer día después de Alex

A penas recuerdo como llegue al departamento, me siento lentamente en mi cama y rasco mi nariz, mierda, todo huele a maldito sexo aquí. Rex menea la cola en la puerta y chasqueo mis dedos sin ganas para que se acerque a mí acaricio sus suaves orejas y al mirar su pelaje frunzo el ceño.

-Ven aquí amigo.

Guio a mi perro hasta el baño y prendo el grifo, su cabeza gira intrigado de un lado a otro y se sorprende cuando un poco de agua cae en su cabeza, uso un poco de jabón liquido en un papel para poder borrar la marca del beso y lo enjuago con agua, sin preocuparme tomo la toalla de mano y lo seco.

-Lo lamento, eso no se podía quedar ahí...

Mi perro trota por el cuarto y sin permiso se sube a la cama, comienza a refregar su cabeza en el edredón como si se tratara de una venganza mientras junto la bandeja de desayuno que quedo ahí, entonces leo la nota:

"Te amo como nunca ame a nadie Bastian, gracias por devolver mi felicidad"

Mi corazón se estruja un poco más.

Tercer día después de Alex

-¡Mierda!

-¿Cómo alguien puede vivir asi?

-¡Bastian donde estas!

Escucho que mis hermanos me llaman pero no puedo responderle, entonces un estruendo me parte la cabeza ¿Vidrio roto? No lo se pero todo me retumba y me quejo.

-Alli esta-suspira Lucca-venga, ayúdame a levantarlo...

-¿Cuánto alcohol tomaste? ¡Dios!

Suspiro ¿Esa es la voz de mi padre? Ni siquiera puedo distinguirla.

-Mucho-me arreglo para responder.

Una semana después de Alex

-Me alegra saber que ya la superaste-Marco se olvida los temas laborales como siempre y salta a lo personal.

-No hay nada que no se pueda ahogar en una botella de alcohol-respondo mientras arreglo un par de cosas en la computadora.

-Quien dice una dice veinte ¿verdad?

-Quien dice una es una.

-Entonces ¿La pudiste superar?-le doy una mirada amenazante y el levanta los brazos en forma de rendición.

Es bueno cuando comprenden que callar es bueno.

Una semana tres días después de Alex

-No vengas a buscar las peleas aquí-salgo del bar de mala muerte donde el dueño me ha echado por buscar roña, pero bien sabe que volveré y yo se que no me lo prohibirá.

Trato de caminar en línea recta sin poco éxito mientras busco las llaves de mi auto en mis bolsillos, entonces choco contra algo duro y de mi altura.

-¡Mierda! ¿Por qué no te fijas por dónde vas?-escupo aunque no creo que pueda entenderme bien trato de aclarar la vista y no hay más que cemento ¿Estoy discutiendo con un poste? Carajo.

-Está loco-escucho que se burlan detrás de mi.

-¿A caso quieren probar cuanto?-los reto.

-¿Quieres pelea niño bonito?-aclaro la vista nuevamente y sonrió.

-No creo que dures ni un segundo pedazo de mierda...

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Hola mis amad@s lector@s!!!

Me extrañaron? yo si :3

Se que es poco pero sepan disculpar, la universidad me consume :o estaba pensando que este tal vez sea el ultimo capitulo de Bastian :o

Mmmm no se ¿A ustedes les gusta cuando relata el?

Saludos, desde unas frías sabanas.

▼Noodle▼