here we are again #2; louis

Epílogo

Brooklyn

Ian trata de respirar lo más calmado que puede, pero falla en el intento y se ríe nerviosamente.

—Tranquilo, muchacho, sólo anda con ella —dice Louis. Ian, el esposo de Sarahi, bufa un par de veces.

Sarahi, a su s veintidós años, estaba por convertirse en madre primeriza. ¿Quién iba a pensar que el chico que estaba bailando en la graduación con mi chica, se casaría con ella tiempo después?

La vida es una ruleta rusa.

—¡Oh Dios, llegué a tiempo! —el ruido de los zapatos tenis de Sandy resuena en el pasillo justo cuando se detiene. Charles, su prometido, la acompaña a la par. Sandy nos saluda y empuja a Ian para que se mueva y deje su estado en shock.

Ian saluda a Charles y se despide cordialmente, le deseamos suerte en el parto de mi niña.

—¡Mamá! —Cody corre hasta nosotros. Nos percatamos de Joey y su novia Carol —. ¿Dónde está Harry?

—En la cafetería con Paty.

Jamás nos esperábamos que Sarahi decidiera no estudiar la universidad, ya que se estaba haciendo cargo del Styles' Greenhouse.

Carol me saluda amablemente y luego reparte los besos a todos.

—¿Cómo va Sari, mamá? —pregunta Joey.

—Su última dilatación fue hace quince minutos, y estaban por comenzar, amor.

—Mami... —Joey me abraza y se detiene al querer decirme algo. Louis finge enojo y le advierte —. Mamá es mía y lo sabes, papá —le dice sin soltarme.

El día en que mi niña me dijo que estaba embarazada, me cruza por la mente; ella llegó mientras cortaba las hojas secas de algunas plantas. Venía del Greehouse con el permiso de su hermano, es decir, Joey. Sí, él también estaba a cargo. Hablamos del susto que Carol y Joey nos dieron al creer que ella estaba embarazada a la edad de quince años, pero fue una falsa alarma.

Pero finalmente, me confesó la razón de su visita: estaba esperando un bebé de Ian. Su emoción al contármelo no tuvo precio. Estaba más que feliz con aquella noticia, y cuando la familia entera lo supo, festejamos algo improvisado.

—Ten tu café, mamá —la voz de Harry hace que Joey deje de abrazarme para poder saludar a su hermano y a su novia, Paty.

—Gracias, amor.

—¿Ya nació? —pregunta Paty mirándonos.

—No, pero necesito saber que fue por qué aposté con Ian a que era niño —dice Louis riendo.

—¿Papá? —Joey lo llama —. ¿Puedo hablar contigo?

La tensión que noto en Carol me alarma por lo que sea que esté sucediendo entre ellos. Sus ojos me miran y rápidamente los aparta. Louis accede a hablar con Joey.

—¿Cómo ha estado, señora Tomlinson? —pregunta Carol. El cuerpo de esa muchacha se me hacía muy diferente ahora que la observaba bien. Pero decido guardar mis pensamientos.

—Bien, cariño. Nerviosa por todo lo de Sarahi solamente.

—Eso veo, Dios, ese bebé ha traído más locura a la familia —se ríe.

Louis y Joey regresan un poco perturbados, mirando a todos lados menos a Carol. Con mi mirada, le pregunto a Louis que sí que ha pasado, pero niega con la cabeza.

—Mami, ¿puedo hablar contigo? —pregunta Joey.

—Jo... —Louis trata de advertir. Mi ceño se frunce porque no comprendo que se traen.