–No. Es mi perro.
–Yo lo tuve primero.
–Y lo dejaste abandonado en una perrera. – Digo a la defensiva.
– Yo no lo abandoné.
–Pues yo lo adopté. Además ¿cómo sabes que es tuyo?
–Porque Foster tiene una marca de nacimiento debajo de su orejas.
–Cualquier perro puede tener una marca así.
–Foster no es cualquier perro. Lleva en su collar las iniciales de mi apellido. – Le da vuelta a la insignia. – Ves.
Admito que cuando lo adopté llevaba esa pequeña plaquita de metal en su collar y al comprarle uno nuevo no me deshice y cambié esa placa a la correa nueva solo porque le quedaba bien. Soy una tonta por no darme cuenta que otro podía reclamar su perro por medio de esa placa.
Se leía B.W.
–Blake Wallace. –confirma.
Me suena tan familiar el apellido. Pero no lo reconozco.
–Aun así, no te da el derecho de reclamarlo.
Ignora lo que digo y le habla a Ethan.
–Lo siento amigo, ella te maltrataba.-Hace como si el perro le hablara en el oído.– Huh, es una chica mala. ¿Tienes hambre?
El maldito lame la mano de Evan.
Ethan eres un traidor para la nación.
–Dicen que los de igual raza se llevan bien.
¡Ja! Chupate esa Evan.
Me ignora.
–Es mi perro. –digo nuevamente.
–Corrección nuestro perro. Eres mi novia y lo que es tuyo es mío ¿no?
Maldito el día en el que te conocí.
Fue ayer.
Ok. Maldito el día en el que acepté fingir ser su novia "de mentiras".
Fue hoy.
Maldita mi conciencia que tiene que deducir todo.
–Pienso que debemos dejar que elija. –digo.
–Está bien. –acepta.
(...)
–Ven a mi Ethan. –chaqueo los dedos.
–Foster, Foster ven, ven. –Evan extiende los brazos.
–No, Ethan no lo escuches, él te abandonó en una perrera. Yo te doy comida todos los días y te doy cariño. Ven a mí. –Me doblo a la altura de Ethan.
–Foster, ven con tu papi. –Detiene su voz unos segundos. Y sigue–: Yo te daré mucha más atención, te prometo llevar a la masajista para que te relajes, incluso yo puedo darte esos masajes. Te prometo una cachorra para ti. Ven aquí.
Esto era ridículo. Estábamos en el parque de enfrente, a unos metros de distancia del perro para que pueda elegir con quién quiere quedarse. Aparentemente nos ignora y decide quedarse sentado, mirándonos llamarlo como idiotas.
–Es ridículo.
–Tú lo propusiste. –me dice del otro lado.
–Debo darle de comer. Estoy segura que eso quiere.
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Prometo Fingir Amarte
RomanceTodo lo que puedo decir es que Evan Black es alguien con muchos misterios, a parte de ser un chico malo, con tatuajes en el pecho y la espalda; que lo dejan caliente, peligroso y prohibido. Pero no todo es perfecto, él tiene un pasado que ni su somb...