Me despierto. Miro la hora y son las 1 AM.
Desventaja de no tener celular: Sin alarma.
Me levanto y bajo para beber agua. Estoy sedienta, la hamburguesa estaba algo salada, sin embargo estaba riquísima. Mi trasero estaba más que agradecido de tener una razón para engordar. Un ruido extraño me asusta y causa que salte en mi lugar. La casa está a oscuras y probablemente algo se cayó. Pero una cosa no puede caerse de la nada ¿o sí? Mi mente corre; ladrones, asesinos, locos. Mierda en realidad necesito una navaja.
Para defensa personal por si las dudas.
Se me pone los pelos de punta de tan solo imaginarme un ladrón en la casa.
Dejo mi vaso en el fregadero. Y voy hacia el ruido.
¿Loco eh? Debería estar corriendo en la dirección opuesta y mis piernas se mueven hacia el lugar del ruido, mis piernas no obedecen a mi mente. Mi cerebro dice "Corre y llama a la policía" pero mis piernas solo avanzan hacia el peligro.
– ¿Hay alguien ahí?
Si, aquí estoy y vengo a robar tu casa un momento.
Siempre en los momentos inoportunos conciencia.
Tanteo el interruptor de la luz. La luz de la despensa se enciende.
Y ahí estaba Ethan, tratando de comer la comida de las bolsas nuevas.
Ethan. Suspiro de alivio.
Bueno al menos no fue un ladrón. Y ahora me doy cuenta de porqué la comida de Ethan no dura y él siempre está más grande. Le doy agua y un poco de comida. Al cabo de unos instantes está arañando la puerta.
– Oh, vamos. Enserio Ethan tienes que beber tanta agua. –lo regaño.
Destrabo y abro la puerta y él corre hacia afuera. Corre como si huyera de mí.
Y cuando voy tras él lo pierdo de vista y no lo escucho por ninguna parte. Ethan nunca hace eso, salir y perderse. Siempre fue hacer pis y volver. Camino más, adentrándome al parque, pero la oscuridad me rodea.
Quiero llorar y gritar. Mi perro. Ethan. Perdido.
Vuelvo a casa y me paseo por la sala, incapaz de quedarme quieta. No puedo hacer nada, estoy atada de manos y pies. No tengo celular y si lo tuviera no es como que llamaría a Ethan para que volviera. Ojalá pudiera rastrearlo. Me siento insignificante. No puedo hacer nada. La noche era un obstáculo, si salía a buscarlo sería peligroso.Quien sabe a qué lugar de mala muerte habrá ido.
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Prometo Fingir Amarte
RomansTodo lo que puedo decir es que Evan Black es alguien con muchos misterios, a parte de ser un chico malo, con tatuajes en el pecho y la espalda; que lo dejan caliente, peligroso y prohibido. Pero no todo es perfecto, él tiene un pasado que ni su somb...