Secrets.

Capítulo Diecisiete. 6/8.

Escuchaba unos golpes muy lejanos, pero entré conforme iba despertando, más cercanos eran.

-¡_____!. -Escuché mi nombre a lo lejos.

Lentamente fui abriendo los ojos, cayendo en la realidad de que llamaban a mi puerta. Me levanté de la cama, mis pasos eran bastante lentos y los golpes detrás de la puerta no paraban.
Antes de abrir la puerta arregle un poco mi cabello con los dedos, lo más seguro era que tuviera un nido de pájaros en la cabeza.
Abrí e inmediatamente alguien me abrazó. Reconocí a la persona, era Spencer...
En ese momento lo abracé con fuerza, las lágrimas volvieron a hacerse presentes, eran una extraña mezcla de alegría al verlo y los sentimientos encontrados de ayer. Mientras ocultaba mi rostro en su pecho, puse atención a lo que estaba diciendo.

-¿Cómo estás?, ¿Estás bien?. -Me acerco más a sus cuerpo. -Siento mucho lo que paso ayer.

-Supongo que bien. -Dije separandome un poco de su cuerpo. -Era algo que tarde o temprano tenía que pasar.

-No digas eso, no tenía porque haber hecho eso, eres menor de edad. -Habló sentandonos en la cama.

-Lo sé, pero eso es algo que Skrabits no sabe. -Me seque las lágrimas con la manga de mi sudadera.

-El único lado bueno, es que esto termina hoy... -Dijo mientras jugaba con sus dedos.

Me recoste en la cama dejando mi cabeza en sus piernas. -No quiero hacerlo, no puedo...

-Yo tampoco quiero que lo hagas, no tengo un buen presentimiento. -Habló acariciando mi cabello.

-Aún así tengo que hacerlo, esto no se puede echar a perder por mi culpa. -Susurre sorbiendo mi nariz.

-Mejor dejemos de hablar de esto. -Hizo una pausa.

-¿Y los demás?. -Pregunté.

-Fueron a comer. -Me contestó mientras sonreía.

-¿Y que haces aquí?. -Dije levantándome. -Debiste ir con ellos.

-Lo iba a hacer, pero creí que era más importante saber como estabas tú. -Suspiró desviando la mirada, pero aún así alcancé a ver el rubor en sus mejillas. -Morgan dijo que estarías aquí, pero cuando no contestabas... creí que habías huido.

-Creo que Morgan adivinó que dormiría hasta tarde. -Sonreí.

-¿Quieres ir a comer?. -Preguntó levantándose de la cama.

-Si, ¿Qué horas son?. -De igual forma me levanté de la cama.

-Van a ser las tres de la tarde. -Creo que se rió al ver mi expresión.

-¡Es demasiado tarde!. -Comencé a buscar entre mi ropa.

Spencer se comenzó a reír. -Oye tranquila. -Se aclaró la garganta. -No es demasiado tarde.

-Si lo es. -Dije tomando un poco de ropa. -Ahora espérame, en quince minutos estoy lista.

-Está bien, yo te espero. -Dijo acostandose en la cama.

Entré al baño, comenzando a desvestirme rápidamente. Pero al no tener cuidado varias heridas se abrieron, buscando con que limpiarlas tiré sin querer la bolsita donde tenía todas mis navajas y al caer provocaron bastante ruido. Por dentro suplicaba mil veces que Spencer no escuchará nada, al no escuchar nada de su parte me tranquilice un poco.

Al salir de bañarme me cambie con la ropa que había tomado, un sweater gris de mangas gindas y un pantalón de mezclilla. Me cepille el cabello, luego me maquille un poco, saliendo del baño vi que Spencer aún estaba acostado en la cama, suponía que estaba dormido.