LYDIA STONE
Diviso a un hombre de aspecto mayor que caminaba hacia nosotras, su ceño fruncido marcaba sus arrugas en la frente y lucía enojado, claramente esto era obra de la pelirroja que no mantuvo su boca cerrada.
--¿Quién es él?-- susurré a Sofía.
--Es el director-- contesta de la mísma forma.
Oh.
--Señoritas, a mi oficina-- sentencia con una voz ronca al encontrarse frente a nosotras.
Asentimos con la cabeza y sin decir palabra alguna caminamos siguiendo sus pasos, me sentía una "niña problema" al pasar con la mirada en el suelo hacia aquella oficina.
Sabíamos que esto pasaría, pero no importa ya que tenemos planeado qué decir. Elizabeth no va a poder culparnos.
El director abrió la puerta, un olor desagradable entra en mis fosas nasales, quería vomitar.
Esperamos en el pequeño corredor, el director entró a lo que parece ser su oficina dando la orden que nos quedaramos ahí.
Una chica con anteojos se encontraba parada a un lado de mi, tenía su mirada puesta en el suelo.
--Hola, soy Lydia-- hablo llamando su atención.
--Soy Gilda-- contesta con una media sonrisa.
--¿Te metiste en problemas?-- cuestiono alzando una ceja.
Ella infla sus mejillas y abre sus ojos como platos.
--Si, bueno...es que había una chica en la cafetería que tenía puesto un letrero en la espalda pidiendo que la patearan, yo solamente concedí su petición pero creo que se la dí más fuerte de lo que ella quería y el director me vió-- farfulla sin ánimos
--Que mala suerte, todas las chicas del instituto la patearon y solo te vieron a ti-- hablo soltando una pequeña risa.
--¡Lo sé! Y ¿tú qué hiciste?-- pregunta enarcando una ceja.
--Creéme, no terminaría de contarte.
La voz del viejo amargado resuena sobresaltándome, nos indica que debemos pasar a la oficina inmediatamente.
Me despido con un ademán de Gilda y camino con Suzzet y Sofía a mi lado.
Abro la puerta, rayos, Elizabeth si que huele a mierda.
Ella se encontraba sentada en una de las sillas llorando.
Ay por favor, he hecho cosas peores.
--Stone, Brooks y Hansson, quiero que me expliquen porqué le hicieron esa broma a su compañera Elizabeth-- habla el director cruzándose de brazos.
--¿Cuál broma?-- pregunta Suzzet frunciendo el ceño.
--No mientan, ustedes me hicieron esto-- habla con un hilo de voz la pelirroja alzando sus manos.
--El vaso que te derramé, fué un accidente y te lo dije, me llamaste "estúpida" era mi proyecto de Biología, ahora reprobaré-- se excusa tocando su pecho con dramatismo.
--¿Y porqué tu amiga quitó la silla haciendo que me cayera?-- pregunta enojada tensando su mandíbula.
--Yo no pensé que te sentarías en ella, yo sólo la tomé, no era mi intención-- habla Sofía cruzándose de brazos.
--Entonces ¿quién pegó ese letrero en mi espalda?.
--No lo sabemos, ninguna de nosotras fué, seguramente fué cualquier otra persona-- defiendo --Es increíble que después de que tú me hayas jugado una broma poniendo eso en mi asiento, ahora me acusas de algo que yo no hice-- finjo llorar y lágrimas brotan de mis ojos.
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Bajo las Estrellas
Teen FictionUno no deja su pasado. El pasado nos sigue, porque fuímos y somos parte de ello. Puedo volver a sentir esa punzada en mi pecho, y el sabor metálico de la sangre resbalarse por mis labios, el dolor en mis piernas, y la sensación de caer en cualquier...