Eres Lo Que Necesito | Aguslina

28- Problema y confesión

Algo tenía, algo le pasaba y no iba a quedarse con la duda. Salió a toda prisa del Instituto y se chocó con su amigo.

-Ey, ey, ey ¿a dónde vas tan apurado?- Ruggero lo detuvo.

-Tengo que ver a Carolina- en realidad si estaba apurado, apuradisimo.

-¡La bailarina!- canturreo y se burlo- ¿Estás enamorado de ella?- le hablaba pícaro.

-¿Me podes soltar?- empujó a su amigo para salir de su agarre.

-No me lo negas- continuaba burlándose.

-Tengo que irme Ruggero, después hablamos- quiso escaparse pero lo detuvo nuevamente.

-Te dejo ir amigo, pero decime ¿dónde se metió tu prima?-

-No la esperes porque se fue. Se fue con Carolina por eso tengo...- se detuvo y lo miró -¿Porqué preguntas por Karol?- no era un primo celoso y cuida, sólo que... conocía a su amigo.

-Tranquilo rockero, no es como pensas- levantó las manos- Nos anotamos juntos en teatro y quería...-

-¿Te anotaste con mi prima?- lo interrumpió Agustín, acercándose a él.

-Para celoso- se alejó un poco- Tu prima es muy divertida y buena para esos asuntos...- Agustín lo miró enfurecido- Para los asuntos de actuación- se retractó divertido.

-Tené cuidado Ruggero, es mi prima- lo "amenazó" de cierta forma.

-¿No corrias apurado vos?- cambiar de tema, una excusa muy básica pero eficaz. Agustín asintió recordando y salió corriendo.

-¡Mañana hablamos vos y yo!- le gritó de media cuadra.

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Trataba de negarse a si misma que Agustín no le movía todo el piso, pero no se lo creía. Es que era imposible no ilusionarse con él, tan bueno, tan lindo, tan preocupado, tan talentoso... bueno no terminaba más de calificarlo. Seguramente muchas estuvieron en su situación, enamorarse del chico ideal que era Agustín...¿enamorarse?¿Estaba enamorada? ¡Si! Estaba enamorada de Agustín. ¿Y ahora que? Su cabeza estaba a mil por hora, pensando y pensando, tratando de darle solución a lo que llamó "el problema".
Las cosas difíciles le pansan a ella, o eso se repetía acostada en su habitación. Es que era prácticamente imposible no fijarse en el, es como si ver casi ángeles no te diera ganas de cambiar al mundo, o de tener un amor eterno como el de Mar y Thiago... se iba por las ramas. Fue a darse una ducha para aliviarse y dejar de maquinarse.

-¡Ah!- gritó Carolina cuando ingresó a su habitación luego de su baño.

-¡Shh, no grites, no grites!- le susurró al oido mientras le tapaba la boca.

-¡¿Agustín?!- éste la soltó y se enfrentó a ella.

-Si, soy yo...-

-¡¿No podes golpear la puerta?! Pareces un delincuente entrando por la ventana- se sentó aún asustada en su cama.

-Supuse que no ibas a atenderme...- se sentó a su lado- Como no quisiste verme... ¿Qué te pasa Caro?-

-No me pasa nada, y no es que no quise... te dije que no podía y...- trataba de decir algo creíble.

-No mientas Caro... algo te pasó y por eso te fuiste- la obligó a mirarlo.

-Ya te dije que nada... y ahora te pido que te vayas-  tomó su mano y lo levantó.

-No me voy a ir- se acercó a ella... demasiado. Carolina sintió una corriente recorrerle el cuerpo y se puso nerviosa.

-...Agustín....- le encantaba tenerlo cerca pero las palabras de Valentina seguían en su cabeza.

-Pedime que me vaya ahora- susurraba en su boca. Sabía que ella no resistiria tenerlo cerca. Carolina no podía ni hablar-No me esquives Caro, por favor-

-...N-no te es...esquivo...- apenas podía hablar, sentía unas ganas enormes de besarlo.

-Si que lo haces y no sabes como me mata.... me encantas Caro- sintió sus mejillas enrojecer, pero eso no le importaba moría por escuchar de nuevo lo que acababa de decirle.

-...n-no...-

-Me encantas, me volves loco, me gustas... pensé que te lo demostraba pero por cómo me dejaste hoy, siento que ya tengo que decírtelo más claro- sonrió apenas y Carolina se derretia.

-¿...t-te gusto?...- los nervios no la dejaban. Agustín rozo sus labios con los suyos, una terrible tentación; junto sus frentes y cerró sus ojos.

-Más que eso Caro... nunca estuve en ésta situación y... No se como decirte o que tengo que hacer para que sepas que... quiero estar con vos, me pasan cosas con vos- ahora era él era acompañado por los nervios, comenzó a hablar y hablar sin parar.
Carolina escuchaba fascinada sus palabras pero esa fascinación desapareció cuando su mente le recordó lo que le dijeron en la tarde.

-Yo...yo no soy el tipo de chica que acostumbras- con todas sus fuerzas se separó de Agustín dándole la espalda.

-Y eso es lo que me encanta- la giró para que lo viera- Sos única, auténtica, tierna, hermosa... y, sos perfecta para mí Caro- de nuevo se acercó, la miro profundamente y acarició su mejilla. La tomó del cuello y la acercó lentamente a él. Despacio y suave la besó, quería hacerlo eternamente.

Se separaron después de un rato y con la respiración en sintonía ella se animó a hablar.

-También me gustas- lo dijo despacito como si le contará su mayor secreto. Agustín sonrió ampliamente al escucharla.

-¿Qué dijiste?- le preguntó

-Te dije que... me gustas- Caro se sonrojo apenas. Él cerró sus ojos pero contianuaba sonriente.

-Te escuché la primera vez, pero quería que lo repitieras- rieron ambos. Se miraron nuevamente y volvieron a besarse.

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La mañana llegó y los rayos del débil sol de invierno cayeron justo en su rostro. Abrió los ojos despacio suspirando. Quiso tomar su teléfono para ver la hora pero algo se lo impedía, prendido a su abdomen el brazo de Agustín la tenía prisionera. Se volteó despacio para no despertarlo y sonrió al ver su carita de dormido. No se acuerda bien en que momento se durmió, se quedaron hablando hasta muy tarde, pero recuerda a la perfección los besos y la confesion ds Agustín.

La alarma comenzó a sonar y eso la volvió a la realidad. Saltó de su cama, había dormido de zapatillas, éste chico la tenía mal.

-¡Agustin!- lo movió apenas pero no tenía respuesta- Agustín despertate, si mi papá te ve aquí me mata- le hablaba mientras continuaba moviendolo, él no despertaba- ¡Agustín!- metió el dedo meñique en la oreja provocando que Agustín despertará asustado.

-Estoydespierto- dijo todo muy rápido sentándose en la cama.

-Tenés que irte ahora- lo levantó y comenzó a empujarlo hasta la ventana- Tita puede subir y verte... y...- Agustin la frenó y se acercó a ella.

-Buen día- le sonrió y la beso tiernamente.

-Buen dia- le respondió ella abranzadolo y disfruntado de sus besos.

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Se que prometi publicar algún capítulo en la semana pero bueno... Soy una incumplida.
Muchas gracias por leer, por comentar, por los mensajitos lindos que me mandan, son tan bonitos jaja
Está vez me comprometo ✋ a escribir y publicar uno o dos más en la tarde, les doy mi palabra...

Besitos 😗😙😘😚