Sirius se despertó por el alboroto que había en la habitación de chicos de primer año de Gryffindor. Resulta que era el único que había estado durmiendo hasta más tarde.
-Venga, Sirius, date prisa si no quieres que lleguemos tarde. -lo presionó James.
El pelinegro se frotó los ojos en un intento de desperezarse y con voz somnolienta dijo:
-¿Que hay a primera hora?
-Herbología, con Slytherin -esa vez habló Remus Lupin, quien ya iba vestido y preparado para bajar al Gran Comedor.
James sabía que a Sirius no le hacía ninguna gracia compartir clase con los Slytherin (ya que en alguna ocasión, el día anterior, había mencionado que todos los de la casa anteriormente dicha le parecían insulsos, amargados y estúpidos, por no añadir también malvados y retorcidos) y por eso frunció los labios como gesto de compasión.
Sirius se vistió lo más deprisa que pudo y bajó con James, Remus y Peter hacia el Gran Comedor. Por el camino se cruzaron una chica de tercero de párpados gruesos y pelo negro azabache que iba acompañada por su hermana pequeña casi igual a ella.
Andrómeda, una de las primas de Sirius, se paró enfrente de su primo.
-Oye Sirius, no se como lo hiciste pero enhorabuena, me siento muy orgullosa de tí.-comentó apresuradamente- No deja que me acerque a ti mientras esté "bajo su control". Dice que no me junte con traidores a la sangre. Piensa que se contagia. Ah y también dice que no quiere que me influyas con tu carácter de "repugnante Gryffindor"-añadió en un susurro aburrido poniendo los ojos en blanco- Lo que no sabe es que soy mayor y ya se con quien juntarme
El chico musitó un gracias, aturdido por tanta información tan de sopetón, pero ella no llegó a escucharlo, ya que su hermana Bellatrix se la había llevado.
Tras la extraña y breve interrupción siguieron su camino hacia el Gran Comedor. Remus se encontraba enmedio de una apasionada charla sobre no-se-sabía-el-qué con James. Daba la sensación de que el chico con aspecto débil aún no se sentía cómodo con la gente con la que iba. Sin duda era una persona muy tímida.
A Sirius no le quedaba otra que hablar con Peter. El muchacho gordo no le caía ni bien ni mal. No había hablado demasiado con él (de hecho solos los dos era la primera) y las veces que lo habían hecho, Pettigrew había soltado cosas que, si la persona que le hubiera estado escuchando no hubiera sido Sirius Black, le hubiese hecho la vida imposible.
Peter Pettigrew era mestizo por parte de madre, que era hija de muggles. Se ve que en su casa tenían una extraña afición por los roedores y animales pequeños en sí como ratas, ardillas, hámsters o cobayas, incluso había mencionado que una vez tuvieron un puercoespín.
Aquello a Sirius le pareció de lo más rarito, pero dejó de pensar en la extraña afición por las ratas cuando recordó que en su família tenían la educativa y nada siniestra tradición de decapitar a los elfos domésticos cuando ya eran muy viejos y poner sus cabezas en vitrinas.
El Gran Comedor estaba casi lleno. Se sentaron en el primer lugar de la mesa de Gryffindor que pillaron y desayunaron con prisa.
( . . . )
La primera clase de Herbología fue una simple presentación e introducción a el contenido del curso. La profesota Sprout, una mujer bajita y gordita con rostro agradable, jefa de la casa de Hufflepuff, se encargaba de impartir la asignatura.
-Mirad esto. -gritó para hacerse oir- ¿Alguien sabría decirme qué es? -la mujer sacó de alguna parte una especie de cactus gris con furnúnculos en vez de espinas- ¿Señorita Evans?
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UNDER PRESSURE ● Marauders.
Fanfic❝ La presión me está aplastando. La locura ríe bajo presión.❞ Todos los años escolares de nuestros merodeadores narrado por nuestro apuesto y célebre Sirius Black. La única que contiene todos los años escolares, escrita con ca...