Las manos de Taehyung se movieron rápidamente para sostener las de Hoseok.
–Te lo pedí. – gruñó el menor al esconder su rostro en el cuello de este.
Hoseok había faltado a la petición que le había dicho. Solo un no me veas.
Taehyung se sintió perder cuando Hoseok lo besaba pero percibió una de sus manos alzarse para tocarle. Inmediatamente escondió su rostro. Temblando en el proceso cuando Hoseok quiso girar su rostro pero el menor lo empujaba con su cabeza para que ni por error lo viera.
–Necesito verte. – pidió Hoseok, con clara angustia en su voz. Sus fuerzas no servían en ese instante, tan débil que Taehyung aún tenía sus muñecas apresadas contra la cama.
Taehyung negó rotundamente contra su hombro.
–Taehyung, yo soy el que no debería darte la cara por no cumplir con mi palabra. El de cuidarte y protegerte contra los que quieran hacerte daño. Te lo dije cuando me declaré, cuando te propuse ser mi novio. – contaba el mayor, haciendo a Taehyung recordar bellos momentos, su primer encuentro, las primeras visitas después del trabajo. Excusas que inventaba Hoseok para quedarse con Taehyung. A pesar de todo el menor sonrió, acurrucándose en el abrazo que dejó que Hoseok le hiciera. Que pasase sus brazos por su esbelta espalda, respirando profundo su aroma embriagador. – Perdóname tú por no ser un buen novio para ti. – culminó Hoseok, abrazándolo con las pocas fuerzas que le quedaba el menudo cuerpo de Taehyung. Soltando un suspiro que al menor le pareció un sollozo.
A Taehyung no le gustaba que Hoseok llorara, se prometió a sí mismo a verlo feliz porque su sonrisa era su medicina de todos los días. Sus días de niñez donde lo único que hacía era recibir maltratos y golpizas se esfumaron con la llegada del mayor, él lo cuidó, lo trató como parte de su familia hasta que un día, sin querer, se enamoraron. Fue inevitable debido a la hermosura de Taehyung y lo cálido que era cuando ambos se encontraban. Además del día D, cuando Taehyung se propuso acorralarlo, había escuchado al mayor conversar con uno de sus amigos sobre el gusto que tenía sobre él. Taehyung planificando todo, esperó al mayor a puertas de su casa con un ligero olor a alcohol.
Hoseok al llegar lo tomó de hombros para despabilarlo cuando llegó a casa. Le llamó por su nombre hasta que despertó. Taehyung le dijo que había perdido las llaves de su casa y que necesitaba una ducha. El mayor sin negativa, le hizo entrar, llevándolo tomado de su cintura hasta el baño, a pesar de que Taehyung podía caminar correctamente pero la idea de que Taehyung no se rehusara al tacto le hizo atrayente.
Solo bastó un tropiezo fingido para que Taehyung se acomode entre los brazos del mayor antes de llegar a las duchas. Unas miradas que penetraron hasta su alma hicieron que se concrete lo tan inevitable desde que se dieron cuenta de sus sentimientos.